sábado, 31 de diciembre de 2011

EL ESPECTRO ELECTROMAGNETICO: • CARACTERISTICAS FISICAS BASICAS

La forma más conocida de energía electromagnética es la luz del sol. La frecuencia de la luz solar (luz visible) es la línea divisoria entre la radiación ionizante (rayos x, rayos cósmicos), más potente y de frecuencias más altas, y la radiación no ionizante, más benigna y de frecuencias más bajas. Hay un espectro de radiación no ionizante. A los efectos de este capítulo, en el extremo superior, justo por debajo de la luz visible, está la radiación infrarroja. Más abajo se encuentra la amplia gama de radiofrecuencias, que incluye (en orden descendente) las microondas, la radio celular, la televisión, la radio FM y AM, las ondas cortas utilizadas en calen- tadores dieléctricos y de inducción y, en el extremo inferior, los campos con frecuencia de red eléctrica. El espectro electromag- nético se representa en la Figura 49.1.
Del mismo modo que la luz visible o el sonido impregnan nuestro entorno, el espacio en que vivimos y trabajamos, también lo hace la energía de los campos electromagnéticos. Análogamente, igual que la mayor parte de la energía acústica a la que estamos expuestos la crea la actividad humana, lo mismo ocurre con la energía electromagnética: desde los débiles niveles emitidos por los electrodomésticos que usamos a diario (los que permiten que funcionen nuestros aparatos de radio y televisión) hasta los elevados niveles que aplican los médicos con fines beneficiosos: por ejemplo, en la diatermia (tratamientos por calor). En general, la intensidad de tal energía disminuye rápida- mente con la distancia a la fuente. Los niveles naturales de estos campos en el entorno son bajos.
La radiación no ionizante (RNI) engloba toda la radiación y los campos del espectro electromagnético que no tienen sufi- ciente energía para ionizar la materia. Es decir, la RNI es incapaz de impartir suficiente energía a una molécula o un átomo para alterar su estructura quitándole uno o más electrones. La división entre la RNI y la radiación ionizante suele establecerse en una longitud de onda de 100 nanómetros aproximadamente.
Al igual que cualquier forma de energía, la energía RNI tiene el potencial necesario para interactuar con los sistemas biológicos, y las consecuencias pueden ser irrelevantes, perjudiciales en diferentes grados o beneficiosas. En el caso de la radiofrecuencia (RF) y la radiación de microondas, el principal mecanismo de interacción es el calentamiento, pero en la región de baja frecuencia del espectro, los campos de alta intensidad pueden inducir corrientes en el cuerpo y por ello resultar peligrosos. No obstante, se desconocen los mecanismos de interacción de las intensidades de los campos de bajo nivel.

viernes, 30 de diciembre de 2011

Conclusiones Campo Electromagnetico

En el presente artículo se ha resumido lo que sabemos acerca de los posibles efectos para la salud de los campos eléctricos y magnéticos, y de lo que aún requiere ser investigado. No se ha dado ninguna respuesta a la pregunta de la política que deba adoptarse, si bien se han presentado sistemas de protección opcionales. A este respecto, parece claro que la base de datos científica disponible es insuficiente para desarrollar límites de exposición en el nivel de T, lo que a su vez significa que no hay motivos para efectuar costosas intervenciones con estos niveles de exposición. La cuestión de si debería adoptarse o no alguna forma de estrategia precautoria (por ej., la evitación prudente) es algo que deben decidir las autoridades responsables de la salud pública y la salud en el trabajo de los distintos países. Si no se adopta tal estrategia, normalmente no se impondrá ninguna restricción de la exposición, porque los límites umbrales basados en la salud están muy por encima de la exposición pública y profesional. Así pues, si bien es cierto que en la actualidad hay diferentes opiniones en lo que se refiere a normas, guías y políticas, existe un consenso general en cuanto a la necesidad de seguir investigando para conseguir una base sólida de cara a futuras acciones.

jueves, 29 de diciembre de 2011

Efectos sobre los cromosomas

Las lesiones por radiación del aparato genético pueden causar también cambios en el número y la estructura de los cromosomas, modificaciones cuya frecuencia se ha observado que aumenta con la dosis en trabajadores expuestos, en supervivientes de la bomba atómica y en otras personas expuestas a la radiación ionizante. La relación dosis-respuesta para las aberraciones cromosómicas en linfocitos de sangre humana (Figura 48.4) se ha determinado con bastante exactitud, de manera que la frecuencia de aberraciones en esas células puede servir de dosímetro biológico útil (OIEA 1986). 


miércoles, 28 de diciembre de 2011

Efectos sobre los genes.

El daño del ADN que queda sin reparar o es mal reparado puede manifestarse en forma de mutaciones, cuya frecuencia parece aumentar como una función lineal de la dosis, sin umbral, en alrededor de 10–5 a 10–6 por locus y por Gy (NAS 1990). El hecho de que la tasa de mutaciones parezca ser proporcional a la dosis se considera indicativo de que una sola partícula ionizante que atraviese el ADN es suficiente, en principio, para causar una mutación (NAS 1990). En las víctimas del
accidente de Chernóbil, la relación dosis-respuesta de las mutaciones de la glicoforina de células de la médula ósea es muy similar a la observada en supervivientes de la bomba atómica (Jensen, Langlois y Bigbee 1995).

martes, 27 de diciembre de 2011

Efectos sobre el ADN.

Cualquier molécula de la célula puede ser alterada por la radiación, pero el ADN es el blanco biológico más crítico, debido a la redundancia limitada de la informa- ción genética que contiene. Una dosis absorbida de radiación lo bastante grande para matar la célula media en división
—2 gray (Gy)— basta para originar centenares de lesiones en sus moléculas de ADN (Ward 1988). La mayoría de estas lesiones son reparables, pero las producidas por una radiación ionizante concentrada (por ejemplo, un protón o una partícula alfa) son en general menos reparables que las generadas por una radiación ionizante dispersada (por ejemplo, un rayo X o un rayo gamma) (Goodhead 1988). Por lo tanto, las radiaciones ionizantes concentradas (alta TLE) tienen por lo común un mayor efecto biológico relativo (EBR) que las radiaciones ionizantes dispersadas (baja TLE) en casi todas las formas de lesión
(CIPR 1991).

lunes, 26 de diciembre de 2011

TECNICAS DE CONTROL DEL RUIDO

Idealmente, el medio más eficaz de control del ruido es evitar desde el principio que la fuente de ruido entre en la fábrica, implantando un programa eficaz de “adquisición de productos sin ruido” para introducir en el lugar de trabajo bienes de equipo diseñados para producir un bajo nivel de ruido. Para llevar a cabo un programa de este tipo, es preciso elaborar unas normas claras y bien redactadas que limiten las características de emisión de ruido de los nuevos equipos, instalaciones y procesos de fabricación. Un buen programa también incluye la vigilancia y el mantenimiento.
Una vez instalados los equipos e identificado el exceso de ruido por mediciones del nivel sonoro, el problema del control del ruido presenta matices más complejos. Sin embargo, existen soluciones técnicas que pueden aplicarse a los equipos existentes. Además, suele haber más de una opción de control del ruido para cada problema. Por consiguiente, para el responsable del programa de control es importante determinar los medios de reducción del ruido más viables y económicos en cada situación concreta.

domingo, 25 de diciembre de 2011

Criterios de exposición

La elección de los criterios de exposición al ruido dependerá del objetivo a conseguir; por ejemplo, la prevención de la pérdida auditiva o la prevención del estrés y la fatiga. La exposición máxima permisible, en términos de niveles medios de ruido diario, pueden variar, según el país, de 80 a 85 ó 90 dBA, con factores de acumulación de 3, 4 o 5 dBA. En algunos países, como Rusia, los niveles de ruido permisibles se establecen entre 50 y 80 dBA, en función del tipo de trabajo realizado y teniendo en cuenta la carga de trabajo física y mental. Por ejemplo, los niveles admisibles para trabajar con ordenadores o para realizar trabajos administrativos exigentes van de 50 a 60 dBA. (Para más información sobre criterios de exposición, ver el artículo “Normas y reglamentaciones” en este mismo capítulo.)

sábado, 24 de diciembre de 2011

Evaluación de la exposición del trabajador

Para evaluar el riesgo de pérdida auditiva debido a la exposición a ruidos específicos, el lector deberá consultar la norma internacional ISO 1999 (1990). Esta norma contiene un ejemplo de esta evaluación de riesgos en su anexo D.
La exposición al ruido debe medirse cerca del oído del trabajador y, para evaluar el riesgo derivado de la exposición del trabajador, no han de realizarse restas que tengan en cuenta la atenuación proporcionada por los protectores auditivos. Si se adopta esta cautela es porque existen sólidas pruebas de que la atenuación proporcionada por los protectores auditivos, tal como se llevan en el trabajo, suele ser inferior a la mitad de la calculada por el fabricante. De hecho, los datos del fabricante se obtienen en condiciones de laboratorio y estos dispositivos no se suelen colocar ni llevar de modo tan eficaz en la práctica. Por el momento, no existe ninguna norma internacional que realice una estimación de la atenuación que ofrecen los protectores auditivos tal como se llevan en la práctica, pero una buena norma empírica sería dividir los valores de laboratorio por la mitad.
En algunas circunstancias, sobre todo en tareas difíciles o trabajos que exigen concentración, puede ser importante minimizar los efectos del estrés o la fatiga relacionados con la exposición al ruido, adoptando medidas de control del ruido. Esta regla puede ser aplicable incluso con niveles de ruido moderados (por debajo de 85 dBA), cuando haya poco riesgo de deterioro auditivo pero el ruido sea molesto o agobiante. En estos casos, es útil realizar evaluaciones de sonoridad aplicando la norma ISO 532 (1975), “Método de cálculo del nivel de sonoridad”. Puede realizarse una estimación de la interferencia con comunicación hablada de acuerdo con la norma ISO 2204 (1979), aplicando el “índice de articulación”, o más sencillamente, midiendo los niveles de ruido de las bandas de octava de 500, 1.000 y 2.000 Hz, para obtener el “nivel de interferencia conversacional”.

viernes, 23 de diciembre de 2011

Iluminación general localizada

Es un tipo de iluminación con fuentes de luz instaladas en el techo y distribuidas teniendo en cuenta dos aspectos: las características de iluminación del equipo y las necesidades de iluminación de cada puesto de trabajo. Está indicado para aquellos espacios o áreas de trabajo que necesitan un alto nivel de iluminación y requiere conocer la ubicación futura de cada puesto de trabajo con antelación a la fase de diseño.

jueves, 22 de diciembre de 2011

Iluminación general e iluminación localizada de apoyo

Se trata de un sistema que intenta reforzar el esquema de la iluminación general situando lámparas junto a las superficies de trabajo. Las lámparas suelen producir deslumbramiento y los reflectores deberán situarse de modo que impidan que la fuente de luz quede en la línea directa de visión del trabajador. Se recomienda utilizar iluminación localizada cuando las exigencias visuales sean cruciales, como en el caso de los niveles de iluminación de 1.000 lux o más. Generalmente, la capacidad visual del trabajador se deteriora con la edad, lo que obliga a aumentar el nivel de iluminación general o a complementarlo con iluminación localizada. En la Figura 46.14 se aprecia claramente este fenómeno.

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Iluminación general uniforme

En este sistema, las fuentes de luz se distribuyen uniformemente sin tener en cuenta la ubicación de los puestos de trabajo. El nivel medio de iluminación debe ser igual al nivel de iluminación necesario para la tarea que se va a realizar. Son sistemas utilizados principalmente en lugares de trabajo donde no existen puestos fijos.
Debe tener tres características fundamentales: primero, estar equipado con dispositivos antibrillos (rejillas, difusores, reflectores, etcétera); segundo, debe distribuir una fracción de la luz hacia el techo y la parte superior de las paredes, y tercero, las fuentes de luz deben instalarse a la mayor altura posible, para minimizar los brillos y conseguir una iluminación lo más homo- génea posible (véase la Figura 46.13).

martes, 20 de diciembre de 2011

Generación de iones negativos

Es un método utilizado para eliminar partículas suspendidas en el aire y, en opinión de algunos autores, para crear ambientes más saludables. Todavía se está estudiando la eficacia de este método como medio para reducir malestares o enfermedades

lunes, 19 de diciembre de 2011

Precipitación electrostática

Se trata de un método útil para controlar partículas. Los equipos de esta clase funcionan ionizando las partículas y eliminándolas después de la corriente de aire por medio de un electrodo acumulador que las atrae y captura. La ionización se produce cuando el efluente contaminado pasa por el campo eléctrico generado por una alta tensión aplicada entre los electrodos de acumulación y descarga. La tensión se obtiene por medio de un generador de corriente continua. El electrodo acumulador cuenta con una superficie grande y suele tener una carga positiva, mientras que el electrodo de descarga es un cable con carga negativa.
Los factores más importantes que afectan a la ionización de partículas son el estado del efluente, su descarga y las características de las partículas (tamaño, concentración, resistividad, etc.). La efectividad de la captura aumenta con la humedad y con el tamaño y la densidad de las partículas, y disminuye al aumentar la viscosidad del efluente.
La principal ventaja de estos dispositivos es que son muy eficaces para recoger sólidos y líquidos, incluso cuando las partículas son muy finas. Además, estos sistemas pueden utilizarse con grandes volúmenes y a altas temperaturas. La pérdida de presión es mínima. Los inconvenientes son su alto coste inicial, sus necesidades de espacio y los riesgos de seguridad que plantean por las altas tensiones que requieren, especialmente si se utilizan en aplicaciones industriales.
Los precipitadores electrostáticos tienen toda una gama de aplicaciones, desde la reducción de las emisiones de partículas en ámbitos industriales, hasta la mejora de la calidad del aire en el interior de domicilios privados. En este último caso se trata de dispositivos más pequeños, que funcionan con tensiones de entre 10.000 y 15.000 voltios. Normalmente disponen de sistemas equipados con reguladores automáticos de tensión que permiten aplicar siempre la tensión suficiente para producir la ionización sin provocar descargas entre ambos electrodos.

domingo, 18 de diciembre de 2011

Filtración de partículas Parte II

La eficacia de un filtro expresa el número de partículas retenidas por el volumen de aire filtrado. Es el mismo valor que se utiliza para caracterizar filtros que también retienen partículas más finas. En este caso, se hace pasar a través del mismo una corriente de aerosol atmosférico compuesto de partículas de entre 0,5 y 1 m de diámetro. La cantidad de partículas capturadas se mide con un opacímetro, aparato que mide la opacidad provocada por el sedimento. El ensayo con Dioctilftalato (DOP) es utilizado para clasificar los filtros de aire particulado de alta eficacia (HEPA). La prueba se realiza con un aerosol fabricado por evaporación y condensación de dioctilftalato, que produce partículas de 0,3 m de diámetro. El método se basa en la propiedad fotodispersora de las gotas de dioctilftalato: si some- temos el filtro a esta prueba, la intensidad de la luz dispersada será proporcional a la concentración superficial de este material y podrá medirse la penetración del filtro por la intensidad relativa de la luz dispersada antes y después de filtrar el aerosol. Para que un filtro obtenga la denominación HEPA, debe demos- trar una eficacia superior al 99,97 % en esta prueba.
Aunque existe una relación directa entre ellos, los resultados de los tres métodos no son directamente comparables. La eficacia de todos los filtros disminuye a medida que se van obstruyendo y entonces pueden convertirse en fuente de olores y contaminación. La vida útil de un filtro de alta eficacia puede alargarse en gran medida colocando uno o varios filtros de menor rango delante del filtro de alta eficacia. En la Tabla 45.5 se presentan los valores de rendimiento inicial, final y promedio de diferentes filtros, conforme a los criterios establecidos por la norma ASHRAE 52-76 para partículas de 0,3 m de diámetro.

sábado, 17 de diciembre de 2011

Formaldehído

El formaldehído es un contaminante importante del aire interior, y debido a sus propiedades químicas y tóxicas se recomienda una evaluación individualizada. Existen diferentes métodos para detectar el formaldehído en el aire, todos ellos basados en la toma de muestras para un análisis posterior, con fijación activa o por difusión. El método de captura más apropiado dependerá del tipo de muestra (emisión o inmisión) utilizado y de la sensibilidad del método analítico. Los métodos tradicionales se basan en la obtención de una muestra haciendo borbotear el aire a través de agua destilada o de una solución de bisulfato sódico al 1 % a 5 C, y a continuación analizándolo por métodos espectrofluoro- métricos. Durante su almacenamiento, también debe conservarse a 5 C. El SO2 y los componentes del humo del tabaco pueden interferir en el análisis. Cada vez se utilizan con mayor frecuencia en el análisis del aire interior sistemas o métodos activos que capturan contaminantes por difusión con adsorbentes sólidos; constan de una base que puede ser un filtro o un sólido saturado con un reactivo, como el bisulfato sódico o la 2,4-difenilhidrazina. Los métodos que toman el contaminante por difusión, además de las ventajas generales propias del método, son más sensibles que los métodos activos debido a que el tiempo necesario para obtener la muestra es mayor (Freixa 1993).

viernes, 16 de diciembre de 2011

Ozono

El ozono, O , sólo puede encontrarse en ambientes de interior en situaciones especiales en las que se genera de forma continua, ya que se degrada rápidamente. Se determina mediante métodos de lectura directa, tubos colorimétricos y métodos de quimioluminiscencia. También puede detectarse por métodos utilizados en higiene industrial que pueden adaptarse fácilmente para el aire interior. La muestra se obtiene con una solución absorbente de yoduro potásico en un medio neutral y a continuación se somete a análisis espectrofotométrico.

jueves, 15 de diciembre de 2011

Dióxido de azufre

Para determinar el dióxido de azufre, SO2, en un ambiente interior se utiliza un método espectrofotométrico. Se hace borbotear la muestra de aire a través de una solución de tetracloromercuriato para formar un complejo estable que, a su vez, se determina espectrofotométricamente después de reaccionar con pararosanilina. Otros métodos se basan en la fotometría de llama y en la fluorescencia ultravioleta pulsante, y también existen métodos basados en la derivación de la determinación antes del análisis espectroscópico. Es un tipo de detección utilizado para monitores de aire atmosférico, aunque no es adecuado para el análisis del aire interior debido a la falta de especificidad y a que muchos de estos monitores requieren un sistema de ventilación para eliminar los gases que generan. Dado que se han reducido enormemente las emisiones de SO2 y a que este compuesto no es considerado un contaminante importante del aire interior, el desarrollo de monitores para su detección no ha avanzado mucho. Ahora bien, existen instrumentos portátiles en el mercado que pueden detectar el SO2 basándose en la detección de pararosanilina (Freixa 1993).

miércoles, 14 de diciembre de 2011

EVALUACION DEL ESTRES POR CALOR E INDICES DE ESTRES POR CALOR (II)

En general, los mecanismos del estrés por calor se conocen bien y las prácticas de trabajo para ambientes cálidos están bien establecidas. Entre ellas se incluyen: conocimiento de los signos de advertencia de estrés por calor, programas de aclimatación y rehidratación. No obstante, el gran número de accidentes que siguen produciéndose sugiere la necesidad de repasar estos conocimientos.
En 1964, Leithead y Lind realizaron una gran encuesta y concluyeron que los trastornos por calor se producen por una o más de las razones siguientes:
1. la existencia de factores como deshidratación o falta de aclimatación;
2. apreciación inadecuada de los peligros del calor, ya sea por parte de las autoridades supervisoras o por las personas en situación de riesgo,
3. circunstancias accidentales o imprevistas que causan la expo- sición a un gran estrés por calor.

Los autores concluyeron que muchas de las muertes podían atribuirse a negligencia o falta de consideración y que cuando llegan a producirse trastornos, es muy importante disponer de todo lo necesario para administrar un tratamiento correcto y rápido.

martes, 13 de diciembre de 2011

EVALUACION DEL ESTRES POR CALOR E INDICES DE ESTRES POR CALOR (I)

El estrés por calor se produce cuando el entorno de una persona (temperatura del aire, temperatura radiante, humedad y velocidad del aire), su ropa y su actividad interactúan para producir una tendencia a que la temperatura corporal aumente. El sistema de regulación térmica del organismo responde para aumentar la pérdida de calor. Tal respuesta puede ser poderosa y eficaz, pero puede también producir un estrés en el organismo que origine molestias, enfermedades o incluso la muerte. Por tanto, es importante evaluar los ambientes calurosos para garantizar la salud y la seguridad de los trabajadores.
Los índices de estrés por calor proporcionan herramientas para evaluar ambientes calurosos y estimar el estrés térmico al que pueden verse expuestos los trabajadores. Los valores límite basados en los índices de estrés por calor indicarán cuando este estrés puede llegar a ser inaceptable.
En general, los mecanismos del estrés por calor se conocen bien y las prácticas de trabajo para ambientes cálidos están bien establecidas. Entre ellas se incluyen: conocimiento de los signos de advertencia de estrés por calor, programas de aclimatación y rehidratación. No obstante, el gran número de accidentes que siguen produciéndose sugiere la necesidad de repasar estos conocimientos.

lunes, 12 de diciembre de 2011

Anemómetros de hilo caliente

Son instrumentos complementarios a los anemómetros de aspas giratorias, ya que su rango dinámico se extiende básicamente de 0 a 1 m/s. Proporcionan una estimación instantánea de la velocidad en un punto del espacio; por consiguiente, es necesario utilizar valores medios en el tiempo y en el espacio. Son instrumentos muy sensibles también a la dirección del aire, de manera que los anteriores comentarios sirven igual en este caso. Finalmente, la medición es sólo correcta desde el momento en que la temperatura del instrumento alcanza la del ambiente que tiene que medirse.

domingo, 11 de diciembre de 2011

Sistemas especiales de extinción con agua y con aditivos en el agua - Sistemas de pulverización de agua

Los sistemas de pulverización de agua aumentan la efectividad de ésta al dividirla en gotas pequeñas, lo que genera una mayor superficie de contacto con el fuego y un aumento relativo de la capacidad de absorción de calor. A menudo se opta por este sistema para mantener fríos grandes depósitos a presión, como las esferas de butano, cuando existe peligro de incendio en una zona adyacente. Es similar al sistema de rociadores, aunque aquí todos los rociadores están abiertos y para abrir las válvulas de control se utiliza un sistema independiente de detección o se realiza la operación de forma manual. Esto permite que el agua fluya a través de la red de canalización hasta llegar a todos los dispositivos de pulverización de salida del sistema de tuberías.

sábado, 10 de diciembre de 2011

Sistemas especiales de extinción

Los sistemas especiales de extinción se utilizan cuando los rociadores de agua no aportan una protección adecuada o cuando resulta inaceptable el riesgo de daño por agua. En muchos casos en que el daño por agua es problemático, pueden utilizarse sistemas especiales de extinción junto con sistemas de rociadores de agua, estando diseñados los primeros para activarse en la fase inicial del incendio.

viernes, 9 de diciembre de 2011

Rociadores

Un rociador consta de un orificio, que normalmente se mantiene cerrado por un elemento liberador sensible a la temperatura, y un deflector de pulverización. El diseño de la descarga de agua y los requisitos de espaciado de cada rociador garantizan una cobertura total del riesgo protegido.

jueves, 8 de diciembre de 2011

SALUD EN EL TRABAJO Y • MEDIDAS DE SEGURIDAD EN AREAS AGRARIAS CONTAMINADAS POR RADIONUCLIDOS: LA EXPERIENCIA DE CHERNOBIL (I)

En general, la contaminación masiva de tierras agrícolas por radionúclidos se produce por accidentes graves en empresas pertenecientes a la industria nuclear o en centrales nucleares. Accidentes de este tipo se produjeron en Windscale (Inglaterra) y al sur de los Urales (Rusia). El accidente más grave tuvo lugar en abril de 1986, en la central nuclear de Chernóbil: provocó una intensa contaminación del suelo en varios miles de kilómetros cuadrados.
Los principales factores que influyen en los efectos de un accidente radiológico en zonas agrarias son los siguientes:
• el hecho de que la radiación se deba a una sola exposición o a una exposición prolongada;
• la cantidad total de sustancias radiactivas que se han incorporado al medio ambiente;
• el ratio o proporción de radionúclidos en la precipitación o lluvia radiactiva caida a distancia;
• la distancia entre la fuente de radiación y las tierras y asentamientos agrarios;
• las características hidrogeológicas y edafológicas de las tierras agrícolas, y los fines a que se destinan;
• las características laborales de la población rural; dieta, sumi- nistro de agua,
• el tiempo transcurrido desde el accidente radiológico.

miércoles, 7 de diciembre de 2011

Necesidades de investigación y tendencias futuras

En la actualidad, la investigación sobre seguridad se centra en mejorar el diseño de los reactores de energía nuclear; más concre- tamente en reducir el riesgo y los efectos de una posible fusión del núcleo.
La experiencia adquirida en accidentes anteriores debe permitir mejorar el tratamiento terapéutico de las víctimas de una irradiación grave. Se está investigando el uso de factores de crecimiento de las células de la médula ósea (factores de crecimiento hematopoyético) para el tratamiento de la aplasia medular inducida por la radiación (insuficiencia en el desarrollo) (Thierry y cols. 1995).
Aún no están claros los efectos que provocan unas dosis bajas de radiación ionizante ni los efectos según la frecuencia de las dosis; dichos efectos deben comprenderse, tanto desde un punto de vista estrictamente científico, como con vistas a establecer dosis límite para la población en general y para los trabajadores. Es necesario desarrollar más la investigación biológica para dilu- cidar los mecanismos carcinogénicos que tienen lugar. Los resul- tados de estudios epidemiológicos a gran escala, especialmente los que se están realizando sobre trabajadores de centrales nucleares, deben contribuir a mejorar la exactitud de las estima- ciones de riesgo de cáncer en poblaciones expuestas a dosis bajas o cuantías bajas de dosis. Los estudios sobre poblaciones expuestas a radiación ionizante a causa de accidentes nos ayudarán a comprender mejor los efectos de dosis mayores, con frecuencia administradas en bajas cuantías de dosis.
La infraestructura necesaria (organización, equipo y material) para una recopilación de los datos a su debido tiempo, que es esencial para la evaluación de los efectos de los accidentes de radiación sobre la salud, debe estar implantada desde mucho antes del accidente.
Por último, es preciso realizar una amplia investigación para determinar con exactitud los efectos psicológicos y sociales de los accidentes de radiación (por ejemplo, la naturaleza, frecuencia y factores de riesgo de las reacciones psicológicas postraumáticas, patológicas o no). Esta investigación es esencial para mejorar la gestión de la población expuesta, tanto por el motivos profesio- nales como por otras razones.

martes, 6 de diciembre de 2011

Principios de protección de la población en general contra la exposición radiactiva

En casos de posible exposición de la población en general, puede ser necesario aplicar medidas de protección diseñadas para impedir o limitar la exposición a la radiación ionizante, algo especialmente importante para evitar los efectos deterministas. Las primeras medidas que deben aplicarse en caso de emergencia son la evacuación, el refugio y la administración de la cantidad adecuada de iodo. Debe distribuirse entre la población expuesta una cantidad adecuada de iodo estable, al objeto de saturar la tiroides e inhibir la absorción de iodo radiactivo. Ahora bien, para que sea eficaz, el bloqueo de la tiroides debe producirse antes o inmediatamente después del comienzo de la exposición. Por último, puede ser necesaria el reasentamiento temporal o permanente, la descontaminación y el control de la agricultura y de los alimentos.
Cada una de estas medidas de reacción tiene su propio “nivel de acción” (Tabla 39.31), que no debe confundirse con las dosis límite de CIPR para los trabajadores y para la pobla- ción en general, desarrolladas para garantizar una adecuada protección en casos de exposición no accidental (CIPR 1991).

jueves, 11 de agosto de 2011

Biodinámica

Como todas las estructuras mecánicas, el cuerpo humano tiene frecuencias de resonancia a las que presenta una respuesta mecá- nica máxima. La explicación de las respuestas humanas a las vibraciones no puede basarse exclusivamente en una sola frecuencia de resonancia. Hay muchas resonancias en el cuerpo, y las frecuencias de resonancia varían de unas personas a otras y en función de la postura. Para describir el modo en que la vibración produce movimiento en el cuerpo suelen utilizarse dos respuestas mecánicas: transmisibilidad e impedancia.

miércoles, 10 de agosto de 2011

VIBRACIONES DE CUERPO COMPLETO

Exposición profesional
Las exposiciones profesionales a las vibraciones de cuerpo completo se dan, principalmente, en el transporte, pero también en algunos procesos industriales. El transporte terrestre, marítimo y aéreo puede producir vibraciones que pueden causar malestar, interferir con las actividades u ocasionar lesiones. En la Tabla 50.1 se ofrece una relación de algunos ambientes que pueden entrañar gran probabilidad de riesgo para la salud.
La exposición más común a vibraciones y choques fuertes suele darse en vehículos todo terreno, incluyendo maquinaria de movimiento de tierras, camiones industriales y tractores agrícolas.

martes, 9 de agosto de 2011

Duración

La respuesta humanas a las vibraciones depende de la duración total de la exposición a las vibraciones. Si las características de la vibración no varían en el tiempo, el valor eficaz de la vibración proporciona una medida adecuada de su magnitud promedio. En tal caso un cronómetro puede ser suficiente para evaluar la dura- ción de la exposición. La intensidad de la magnitud promedio y la duración total pueden evaluarse según las normas expuestas en los siguientes artículos.
Si varían las características de la vibración, la vibración promedio medida dependerá del período durante el que se mida. Además, se cree que la aceleración eficaz infravalora la intensidad de los movimientos que contienen choques o son marcadamente intermitentes.
Muchas exposiciones profesionales son intermitentes, tienen una magnitud variable en cada momento o contienen choques esporádicos. La intensidad de tales movimientos complejos pueden acumularse de manera que dé un peso apropiado a, por ejemplo, períodos cortos de vibración de alta magnitud y períodos largos de vibración de baja magnitud. Para el cálculo de las dosis se utilizan diferentes métodos (véase “Vibraciones de cuerpo completo”; “Vibraciones transmitidas a las manos”, y “Mareo inducido por el movimiento” en este capítulo).


lunes, 8 de agosto de 2011

El principio de precaución o de evitación prudente

Aunque no existe ninguna diferencia real entre estos dos términos, en los debates sobre los campos eléctricos y magnéticos se suele utilizar el de la evitación prudente. Según se ha señalado, puede definirse ésta como la evitación futura, con bajo coste, de la exposición innecesaria mientras exista incertidumbre científica sobre los efectos para la salud. Se ha adoptado en Suecia, pero no en otros países.
En Suecia, cinco organismos gubernamentales (el Instituto de Protección contra la Radiación, la Junta Nacional de Seguridad de la Electricidad, la Junta Nacional de Salud y Bienestar, la Junta Nacional de Higiene y Seguridad en el Trabajo y la Junta Nacional de la Vivienda, Construcción y Planificación) han declarado conjuntamente que “el conocimiento total acumulado hasta ahora justifica la adopción de medidas para reducir la energía de los campos”. Siempre que el coste sea razonable, la política es proteger a las personas de la exposición de larga dura- ción a campos magnéticos de alta intensidad. Durante la instala- ción de nuevos equipos o de nuevas líneas de alta tensión que puedan provocar exposiciones a campos magnéticos intensos, han de elegirse soluciones que determinen exposiciones de menor intensidad, siempre que no impliquen costes elevados o grandes inconvenientes. Según el Instituto de Protección contra la Radiación, por lo general es posible adoptar medidas para reducir el campo magnético cuando los niveles de exposición exceden de los habituales en un factor superior a diez, siempre que tales reducciones puedan hacerse con un coste razonable. En las situaciones en que los niveles de exposición derivados de las instalaciones existentes no sobrepasan los niveles habituales en un factor de diez, debe evitarse realizar una costosa reforma. Ni que decir tiene que este concepto de prevención ha sido criti- cado por muchos expertos de diferentes países, por ejemplo, por expertos de la industria de suministro eléctrico.

domingo, 7 de agosto de 2011

Normas y directrices para la restricción de la exposición de acuerdo con el sistema centrado en la salud

En las guías internacionales, los límites para las restricciones de exposición a los campos están varios órdenes de magnitud por encima de los valores que puede medirse en las líneas eléctricas del tendido aéreo y los que se dan en las profesiones eléc- tricas. En 1990, la Asociación Internacional de Protección contra la Radiación (International Radiation Protection Association, IRPA) emitió unas Guías sobre límites de exposición a campos eléctricos y magnéticos de 50/60 Hz, que han sido adoptadas como base de muchas normas nacionales. Dado que desde entonces se han publicado nuevos e importantes estudios, y en 1993 la Comisión Internacional de Protección contra la Radiación no Ionizante
(International Commission on Non-Ionizing Radiation Protection, ICNIRP), emitió un anexo. En 1993 se realizaron también en el Reino Unido valoraciones de riesgos en concordancia con las de la IRPA.
Estos documentos ponen de relieve que el estado actual de los conocimientos científicos no garantiza la limitación de los niveles de exposición para el público y la población laboral al nivel de T, y que se necesitan más datos para confirmar si existen o no riesgos para la salud. Las directrices de la IRPA y la ICNIRP se basan en los efectos de las corrientes inducidas por campos en el cuerpo, y que corresponden a las que normal- mente se miden en éste (hasta 10 mA/m2 aproximadamente). Se recomienda limitar la exposición de origen profesional a los campos magnéticos de 50/60 Hz a 0,5 mT en el caso de exposi- ción durante toda la jornada y a 5 mT en el caso de exposi- ciones cortas de hasta dos horas. Asimismo, se recomienda limitar la exposición a los campos eléctricos a 10 y 30 kV/m. El límite de 24 horas para el público se fija en 5 kV/m y 0,1 mT. Estas consideraciones sobre la reglamentación de la exposi- ción se basan exclusivamente en informes sobre el cáncer. En los estudios de otros posibles efectos relacionados con los campos eléctricos y magnéticos (por ejemplo, trastornos de la reproduc- ción y trastornos neurológicos y del comportamiento), los resul- tados no se consideran en general lo bastante claros y consistentes como para servir de base científica a la restricción de la exposición.

sábado, 6 de agosto de 2011

Política apropiada Sistemas de protección

En general, son varios los sistemas de protección que han de tenerse en cuenta en las normas, directrices y políticas. El más común es el sistema centrado en la salud, que trata de detectar un efecto específico perjudicial para la salud a un determinado nivel de exposición, independientemente del tipo de exposición, sea éste físico o químico. Un segundo sistema sería el de optimización de un peligro conocido y aceptado, sin necesidad de ningún umbral por debajo del cual sea inexistente el riesgo. En este sistema encajaría la radiación ionizante. Un tercer sistema contempla los peligros o riesgos en los que no se han demostrado con certeza razonable las relaciones causales entre exposición y consecuencias, pero en relación con los cuales existe una preocu- pación general por los posibles riesgos. Este último es el que inspira el denominado principio de precaución, o más recientemente, de evitación prudente , que puede resumirse como evitar en el futuro, con bajo coste, la exposición innecesaria en ausencia de certeza científica. Al abordar la exposición a los campos eléctricos y magnéticos desde esta perspectiva, se han presentado estrategias sistemáticas, por ejemplo, sobre el modo de tender las futuras líneas de alta tensión, de configurar los lugares de trabajo o de diseñar los aparatos electrodomésticos para reducir al mínimo la exposición.
Evidentemente, el segundo de los sistemas mencionados, el de optimización, no es aplicable en lo que atañe a las restricciones de los campos eléctricos y magnéticos, sencillamente porque no se conocen ni están aceptados como riesgos. En cambio, los otros dos sistemas son en la actualidad objeto de consideración.

viernes, 5 de agosto de 2011

Naturaleza y mecanismos de los efectos biológicos de la radiación

Deposición de energía. A diferencia de otras formas de radiación, la radiación ionizante es capaz de depositar suficiente energía localizada para arrancar electrones de los átomos con los que interactúa. Así, cuando la radiación colisiona al azar con átomos y moléculas al atravesar células vivas, da lugar a iones y radicales libres que rompen los enlaces químicos y provoca otros cambios moleculares que dañan las células afectadas. La distribución espacial de los fenómenos ionizantes depende del factor de ponderación radiológica, wR de la radiación (véanse la Tabla 48.1 y la Figura 48.3).

jueves, 4 de agosto de 2011

BIOLOGIA RADIOLOGICA Y EFECTOS • BIOLOGICOS

Tras su descubrimiento por Roentgen en 1895, los rayos X fueron introducidos con tanta rapidez para el diagnóstico y trata- miento de las enfermedades que casi en seguida comenzaron a encontrarse lesiones debidas a exposición excesiva a la radiación entre los primeros radiólogos, que todavía no eran conscientes de sus riesgos (Brown 1933). Las primeras lesiones fueron sobre todo reacciones cutáneas en las manos de quienes trabajaban con los primeros equipos de radiología, pero ya en el primer decenio se habían comunicado otros tipos de lesión, incluidos los primeros cánceres atribuidos a la radiación (Stone 1959).
En el curso del siglo transcurrido desde estos primeros hallazgos, el estudio de los efectos biológicos de la radiación ionizante ha recibido un impulso permanente como consecuencia del uso cada vez mayor de la radiación en medicina, ciencia e industria, así como de las aplicaciones pacíficas y militares de la energía atómica. El resultado es que los efectos biológicos de la radiación se han investigados más a fondo que los de prácticamente cualquier otro agente ambiental. El desarrollo de los conocimientos sobre los efectos de la radiación ha determinado el perfeccionamiento de medidas para proteger la salud humana contra muchos otros peligros medioambientales, además de la radiación.

miércoles, 3 de agosto de 2011

Factor de ponderación tisular wT.

Representa la contribución del tejido u órgano T al efecto lesivo total debido a todos los efectos estocásticos resultantes de la irradiación uniforme de todo el cuerpo. Se utiliza porque la probabilidad de efectos estocásticos debidos a una dosis equivalente depende del tejido u órgano irradiado. Una dosis equivalente uniforme por todo el cuerpo debe originar una dosis efectiva numéricamente igual a la suma de las dosis eficaces de todos los tejidos y órganos del cuerpo. Por lo tanto, la suma de todos los factores de ponderación tisulares se iguala a la unidad. En la Tabla 48.2 se ofrecen los valores de los factores de ponderación tisular.




martes, 2 de agosto de 2011

Procedimientos de medición

Existen dos criterios básicos de la medición del ruido en el trabajo:
• Puede medirse la exposición de cada trabajador, de un trabajador tipo o de un trabajador representativo. El dosímetro de ruido es el instrumento preferible a estos efectos.
• Pueden medirse niveles de ruido en varias áreas, creándose un mapa de ruido para la determinación de áreas de riesgo. En este caso, se utilizaría un sonómetro para tomar mediciones en puntos regulares de una red de coordenadas.

lunes, 1 de agosto de 2011

El método de precisión

Este método es necesario en situaciones complejas, en las que se requiere la descripción más minuciosa del problema de ruido. Las mediciones globales del nivel sonoro se complementan con medi- ciones en banda de octava o de tercio de octava y se registran historiales de intervalos de tiempo apropiados en función de la duración y las fluctuaciones del ruido. Por ejemplo, puede ser necesario medir los niveles pico de los impulsos utilizando el dispositivo de “captación de pico” del instrumento, o medir niveles de infrasonidos o ultrasonidos, lo que requiere capaci- dades de medición de frecuencias especiales, la directividad del micrófono, etc.
Quienes utilicen el método de precisión deben asegurarse de que el margen dinámico del instrumento es suficiente para evitar sobrecargas al medir impulsos y de que la respuesta en frecuencia es suficientemente amplia si se van a medir infraso- nidos o ultrasonidos. El instrumento debe ser capaz de medir

frecuencias de hasta 2 Hz en infrasonidos y de hasta 16 kHz como mínimo en ultrasonidos, con micrófonos que sean suficien- temente pequeños.
Si la persona encargada de realizar las mediciones de ruido es inexperta, puede serle de utilidad dar los siguientes pasos de
“sentido común”:
1. Escuchar las principales características del ruido que se vaya
a medir (características temporales, como por ejemplo si es constante, intermitente o impulsivo; características de frecuencia, como las del ruido de banda ancha, tonos predo- minantes, infrasonidos, ultrasonidos, etc.). Hay que anotar las características más destacadas.
2. Elegir los instrumentos más adecuados (tipo de sonómetro, dosímetro, filtros, registrador de cinta, etc.).
3. Comprobar la calibración y el funcionamiento del instru- mento (baterías, datos de calibrado, correcciones del micró- fono, etc.).
4. Anotar o realizar un esquema (si se utiliza un sistema) de los instrumentos, indicando el modelo y el número de serie.
5. Realizar un esquema del entorno de ruido que se vaya a medir, indicando las principales fuentes de ruido y las dimen- siones y características importantes del recinto o ambiente exterior.
6. Medir el ruido y anotar el nivel medido para cada red de ponderación o para cada banda de frecuencias. Anotar también la respuesta del medidor (“lenta”, “rápida”, “impulsivo”, etc.), y la incertidumbre del medidor (p. ej., más o menos 2 dB).
Si las mediciones se realizan al aire libre, deberán anotarse si se consideran importantes los datos meteorológicos pertinentes, como el viento, la temperatura y la humedad. En las mediciones al aire libre, e incluso en algunas mediciones en recintos cerrados, deberá utilizarse siempre un guardaviento. Han de seguirse siempre las instrucciones del fabricante para evitar la influencia de factores tales como el viento, la humedad, el polvo
y los campos eléctricos y magnéticos, que pueden afectar a las mediciones.

domingo, 31 de julio de 2011

El método de ingeniería

Con este método, las mediciones del nivel sonoro con factor de ponderación A o las que utilizan otras redes de ponderación se complementan con mediciones que utilizan filtros de banda de octava o de tercio de banda octava. El número de puntos de medición y las gamas de frecuencias se deciden en función de los objetivos de medición. También es preciso registrar factores temporales. Este método es útil para evaluar la interferencia con la comunicación hablada calculando los niveles de interferencia conversacional (Speech Interference Levels, SIL), así como para implantar programas de control técnico del ruido y realizar esti- maciones de los efectos auditivos y no auditivos del ruido.

sábado, 30 de julio de 2011

Sistemas de iluminación

El interés por la iluminación natural ha aumentado recientemente. Y no se debe tanto a la calidad de este tipo de iluminación como al bienestar que proporciona. Pero como el nivel de iluminación de las fuentes naturales no es uniforme, se necesita un sistema de iluminación artificial. Los sistemas de iluminación más utilizados son los siguientes:

viernes, 29 de julio de 2011

Distribución de la luz; deslumbramiento Parte II

En general, se produce más deslumbramiento cuando las fuentes de luz están montadas a poca altura o en grandes habita- ciones, porque las fuentes de luz así ubicadas pueden entrar fácilmente en el ángulo de visión que provoca deslumbramiento.
3. Distribución de luminancias entre diferentes objetos y super- ficies: cuanto mayores sean las diferencias de luminancia entre los objetos situados en el campo de visión, más brillos se crearán y mayor será el deterioro de la capacidad de ver provocado por los efectos ocasionados en los procesos de adaptación de la visión. Los valores máximos recomendados de disparidad de luminancias son:
• Tarea visual: superficie de trabajo = 3:1.
• Tarea visual: alrededores = 10:1.
4. Tiempo de exposición: incluso las fuentes de luz de baja lumi- nancia pueden provocar deslumbramiento si se prolonga demasiado la exposición.

Evitar el deslumbramiento es un propósito relativamente sencillo y puede conseguirse de diferentes maneras. Una de ellas, por ejemplo, es colocar rejillas bajo las fuentes de iluminación, o utilizar difusores o reflectores parabólicos que puedan enfocar la luz apropiadamente, o instalar las fuentes de luz de modo que no interfieran con el ángulo de visión. A la hora de diseñar el ambiente de trabajo, la correcta distribución de la luminancia es tan importante como la propia iluminación, pero también es importante considerar que una distribución de luminancias excesivamente uniforme dificulta la percepción espacial y tridi- mensional de los objetos.

jueves, 28 de julio de 2011

Distribución de la luz; deslumbramiento Parte I

Los factores esenciales en las condiciones que afectan a la visión son la distribución de la luz y el contraste de luminancias. Por lo que se refiere a la distribución de la luz, es preferible tener una buena iluminación general en lugar de una iluminación locali- zada, con el fin de evitar deslumbramientos. Por esta razón, los accesorios eléctricos deberán distribuirse lo más uniformemente posible con el fin de evitar diferencias de intensidad luminosa. El constante ir y venir por zonas sin una iluminación uniforme causa fatiga ocular y, con el tiempo, esto puede dar lugar a una reducción de la capacidad visual.
Cuando existe una fuente de luz brillante en el campo visual se producen brillos deslumbrantes; el resultado es una disminu- ción de la capacidad de distinguir objetos. Los trabajadores que sufren los efectos del deslumbramiento constante y sucesiva- mente pueden sufrir fatiga ocular, así como trastornos funcio- nales, aunque en muchos casos ni siquiera sean conscientes de ello.
El deslumbramiento puede ser directo (cuando su origen está en fuentes de luz brillante situadas directamente en la línea de visión) o reflejado (cuando la luz se refleja en superficies de alta reflectancia). En el deslumbramiento participan los factores siguientes:
1. Luminancia de la fuente de luz: la máxima luminancia tolerable
por observación directa es de 7.500 cd/m2. En la
Figura 46.11 se recogen algunos de los valores aproximados de luminancia para varias fuentes de luz.
2. Ubicación de la fuente de luz: el deslumbramiento se produce cuando la fuente de luz se encuentra en un ángulo de
45 grados con respecto a la línea de visión del observador. Las figuras siguientes ilustran maneras y métodos de evitar el deslumbramiento directo y reflejado (véase la Figura 46.12).

miércoles, 27 de julio de 2011

Factores que afectan a la visibilidad de los objetos

El grado de seguridad con que se ejecuta una tarea depende, en gran parte, de la calidad de la iluminación y de las capacidades
visuales. La visibilidad de un objeto puede resultar alterada de muchas maneras. Una de las más importantes es el contraste de luminancias debido a factores de reflexión, a sombras, o a los colores del propio objeto y a los factores de reflexión del color. Lo que el ojo realmente percibe son las diferencias de luminancia entre un objeto y su entorno o entre diferentes partes del mismo objeto. En la Tabla 46.6 se muestran los contrastes entre colores por orden descendente.
La luminancia de un objeto, de su entorno y del área de trabajo influyen en la facilidad con que puede verse un objeto. Por consiguiente, es de suma importancia analizar minuciosamente el área donde se realiza la tarea visual y sus alrededores. Otro factor es el tamaño del objeto a observar, que puede ser adecuado o no, en función de la distancia y del ángulo de visión del observador. Los dos últimos factores determinan la disposi- ción del puesto de trabajo, clasificando las diferentes zonas de acuerdo con su facilidad de visión. Podemos establecer cinco zonas en el área de trabajo (véase la Figura 46.10).
Un factor adicional es el intervalo de tiempo durante el que se produce la visión. El tiempo de exposición será mayor o menor en función de si el objeto y el observador están estáticos, o de si uno de ellos o ambos se están moviendo. La capacidad del ojo para adaptarse automáticamente a las diferentes iluminaciones de los objetos también puede influir considerablemente en la visibilidad.

martes, 26 de julio de 2011

Filtración de partículas Parte I

La filtración es un método útil para eliminar líquidos o sólidos en suspensión, pero hay que tener en cuenta que no elimina gases ni vapores. Los filtros pueden capturar partículas por obstrucción, impacto, intercepción, difusión y atracción electrostática. La filtración en un sistema de aire acondicionado es necesaria por muchas razones. Una de ellas es evitar la acumulación de suciedad que pueda reducir la eficacia del intercambio de calor. El sistema también puede sufrir corrosión a causa de ciertas partí- culas (ácido sulfúrico y cloruros). También se necesita filtración para evitar desequilibrios en el sistema de ventilación debidos a la formación de depósitos en las palas de los ventiladores y al envío de información falsa a los controles por obstrucción de los sensores.
Los sistemas de filtración de aire interior se sirven de al menos dos filtros colocados en serie. El primero, un prefiltro o filtro primario, retiene sólo las partículas más grandes. Debe cambiarse a menudo para que el filtro siguiente dure más tiempo. El filtro secundario es más eficaz que el primero y puede filtrar esporas fúngicas, fibras sintéticas y, en general, polvo más fino que el recogido por el filtro primario. Los filtros deben ser suficientemente eficaces para eliminar partículas irritantes y tóxicas.
La elección de un filtro se basa en su eficacia, en su capacidad para acumular polvo, en su pérdida de carga y en el nivel exigido de pureza del aire. La eficacia de un filtro se mide por las normas ASHRAE 52-76 y Eurovent 4/5 (ASHRAE 1992; CEN 1979). Su capacidad de retención se define como la masa del polvo que retiene por el volumen del aire filtrado y se utiliza para filtros que sólo retienen partículas grandes (filtros de eficacia media y baja). Para medir su capacidad de retención, se hace pasar a través del filtro polvo aerosol sintético, de concen- tración y granulometría conocidas. La parte retenida en el filtro se calcula por gravimetría.

lunes, 25 de julio de 2011

Técnicas de depuración del aire

Es conveniente elegir y diseñar con precisión los métodos de depuración del aire para cada tipo concreto de contaminante. Una vez instalado, el mantenimiento periódico evitará que el propio sistema se convierta en una nueva fuente de contaminación. A continuación se describen seis métodos empleados para eliminar contaminantes del aire.

domingo, 24 de julio de 2011

Control del ambiente

Los ambientes interiores de edificios no industriales suelen tener muchas fuentes de contaminación que, además, tienden a estar dispersas. El sistema más empleado para corregir o prevenir los problemas de contaminación en interiores es, por consiguiente, la ventilación, ya sea general o de dilución. Lo que se hace es mover
y dirigir el flujo de aire para capturar, retener y transportar los contaminantes desde su fuente hasta el sistema de ventilación. Por añadidura, la ventilación general también permite el control de las características térmicas del ambiente interior acondicio- nando y recirculando el aire (véase más adelante, en este mismo capítulo, la sección “Objetivos y principios de la ventilación general y de la ventilación de dilución”).
A fin de diluir la contaminación interna, sólo es aconsejable aumentar el volumen de aire exterior si el sistema es de tamaño apropiado y no se provoca falta de ventilación en otras zonas ni se impide el correcto acondicionamiento del aire. Para que un sistema de ventilación sea lo más eficaz posible, es conveniente instalar extractores localizados en las fuentes de contaminación; el aire mezclado con contaminación no deberá volver a utili- zarse; los ocupantes deberán situarse junto a los difusores de aire
y las fuentes de contaminación junto a los extractores; los contaminantes deberán expulsarse por la vía más corta posible, y los recintos que tengan fuentes de contaminación localizadas deberán mantenerse a presión negativa en relación con la presión atmosférica exterior.
La mayoría de las deficiencias de ventilación parecen ir ligadas a una cantidad inadecuada de aire exterior. Con todo, una distribución inadecuada del aire de renovación también puede dar lugar a problemas de calidad del aire. Por ejemplo, en habitaciones con techos muy altos, que reciban aire caliente
(menos denso) desde arriba, pueden ocurrir problemas de estra- tificación y entonces la ventilación no podrá diluir la contaminación presente en la habitación. La ubicación y colocación de los difusores y retornos de aire en relación con los ocupantes y las fuentes de contaminación es una cuestión que requiere especial atención a la hora de diseñar el sistema de ventilación.

sábado, 23 de julio de 2011

Dióxido de nitrógeno

Se han desarrollado diversos métodos para detectar el dióxido de nitrógeno, NO2, en el aire interior utilizando monitores pasivos y tomando muestras para un análisis posterior, pero estos métodos han mostrado problemas de sensibilidad que probablemente se resolverán en el futuro. El método más conocido es el tubo de Palmes, que tiene un límite de detección de 300 ppb. En el marco no industrial, se deberán tomar muestras durante un mínimo de cinco días para obtener un límite de detección de 1,5 ppb, tres veces superior al valor del blanco para una exposición de una semana. También se han desarrollado monitores portátiles con detección en tiempo real basados en la reacción quimicolumínica entre el NO2 y el reactivo luminol, pero los resultados obtenidos con este método pueden modificarse por la temperatura y su linealidad y sensibilidad dependen de las características de la solución de luminol utilizada. Los monitores con sensores electro- químicos poseen una sensibilidad mayor, pero pueden sufrir inter- ferencias por los compuestos que contienen azufre (Freixa 1993).



viernes, 22 de julio de 2011

Análisis de gases

Los métodos activos son los más utilizados para el análisis de gases, y se llevan a cabo utilizando soluciones absorbentes o sólidos adsorbentes, o tomando directamente una muestra de aire con una bolsa u otro contenedor inerte y hermético. Para prevenir la pérdida de parte de la muestra y aumentar la exactitud de la determinación, el volumen de la muestra debe ser menor y la cantidad de absorbente o adsorbente utilizado debe ser mayor que para otros tipos de contaminación. También debe tenerse cuidado al transportar y almacenar la muestra (conservándola a baja temperatura y reduciendo el tiempo transcurrido hasta su análisis). Los métodos de lectura directa se utilizan con gran frecuencia para medir gases, por la considerable mejora de las prestaciones de los monitores modernos, más sensibles y precisos que antes. Debido a su facilidad de uso y al nivel y el tipo de información que proporcionan, están sustituyendo de forma progresiva a los métodos tradicionales de análisis. En la Tabla 44.13 se muestran los niveles mínimos de detección para los diversos gases estudiados considerando el método de muestreo y el análisis utilizado.
Monóxido y dióxido de carbono, contaminantes habituales del aire interior, se determinan utilizando monitores que los detectan directamente por medios electroquímicos o infrarrojos, aunque los detectores por infrarrojos no son muy sensibles. También pueden determinarse tomando muestras de aire directamente con bolsas inertes y analizando la muestra mediante cromatografía de gases con un detector de ionización de llama, que transforma los gases a metano por medio de una reacción catalítica antes de su detección. Los detectores de conductividad térmica suelen ser suficientemente sensibles para determinar concentraciones habituales de CO2.

jueves, 21 de julio de 2011

Procedimientos analíticos

El número de contaminantes del aire interior es elevado y éstos se encuentran presentes en concentraciones bajas. La metodología disponible hasta ahora se basa en la adaptación de métodos utilizados para controlar la calidad del aire atmosférico o del exterior y la del aire del medio ambiente industrial. La adaptación de estos métodos para el análisis del aire interior implica cambiar el rango de la concentración buscada, cuando el método lo permite, utilizando tiempos de muestreo más largos y cantidades mayores de absorbentes o adsorbentes. Todos estos cambios son apro- piados cuando no conllevan una pérdida de fiabilidad o preci- sión. La determinación de una mezcla de contaminantes suele ser cara y los resultados obtenidos imprecisos. En muchos casos, lo único que se garantizará será la obtención de un perfil de contaminación que indicará el nivel de contaminación durante los intervalos de muestreo, en comparación con el aire limpio, con el aire atmosférico o con otros espacios de interior. Los monitores de lectura directa se utilizan para controlar el perfil de contami- nación, pero pueden no ser adecuados si son demasiado ruidosos
o grandes. Actualmente se están diseñando monitores más pequeños y más silenciosos con una mayor precisión y sensibi- lidad. En la Tabla 44.12 se muestra un esquema del estado actual de los métodos utilizados para medir los diferentes tipos de contaminantes.

miércoles, 20 de julio de 2011

Anemómetros de aspas giratorias

La medición se realiza contando el número de vueltas de las aspas durante un cierto período de tiempo. De esta forma, se obtiene la velocidad media del aire durante ese período de tiempo de una manera discontinua. Los anemómetros presentan dos principales desventajas:
1. Son muy sensibles a la dirección del aire y tienen que orientarse estrictamente en la dirección del flujo de aire. Cuando la dirección del aire varía o se desconoce, tienen que realizarse mediciones en tres direcciones perpendiculares.
2. El rango de medición se extiende de unos 0,3 m/s a 10 m/s. Las limitaciones de este instrumento con velocidades de aire bajas tienen importancia cuando, por ejemplo, se trata de analizar una situación de estrés térmico en la que no debe superarse una velocidad de 0,25 m/s. Aunque el rango de medición puede ampliarse más allá de 10 m/s, rara vez es inferior a 0,3
o incluso a 0,5 m/s, lo que limita en gran medida las posibilidades de utilización de este aparato en ambientes próximos al bienestar, en donde las velocidades máximas permitidas son de 0,5 o incluso de 0,25 m/s.

martes, 19 de julio de 2011

Velocidad del aire

La velocidad del aire debe medirse sin tener en cuenta la dirección del flujo de aire. De lo contrario, la medición tendrá que realizarse en tres ejes perpendiculares (x, y y z ) y calcular la velocidad global por la suma de vectores:


El rango de medida recomendado por la norma ISO 7726 se extiende de 0,05 a 2 m/s. La exactitud exigida es del 5 %. Debe medirse como el valor medio de 1 o 3 minutos.
Existen dos tipos de instrumentos para medir la velocidad del aire: los anemómetros de aspas giratorias y los termoanemó- metros.

lunes, 18 de julio de 2011

Temperatura radiante media (II)

Aquí se describirá sólo la primera de estas técnicas.
El termómetro de esfera negra consiste en una sonda térmica, cuyo elemento sensible está situado en el centro de una esfera completamente cerrada, fabricada con un metal que sea un buen conductor del calor (cobre) y pintada de negro mate para que su coeficiente de absorción en la zona infrarroja se aproxime a 1,0. La esfera se coloca en el lugar de trabajo y se somete a intercambios por convección y radiación. La temperatura del globo (tg) depende así de la temperatura radiante media, la temperatura del aire y la velocidad del aire.
Para un globo negro estándar de 15 cm de diámetro, la temperatura media de radiación puede calcularse a partir de la tempe- ratura del globo utilizando la siguiente ecuación:
En la práctica, es muy importante que la emisividad del globo se mantenga próxima a 1,0 volviéndola a pintar de negro mate siempre que sea necesario.
La principal limitación de este tipo de globo es su largo tiempo de respuesta (del orden de 20 a 30 minutos, dependiendo del tipo de globo utilizado y de las condiciones ambientales). La medi- ción es válida sólo si las condiciones de la radiación se mantienen constantes durante ese período de tiempo, y eso no siempre es posible en los entornos industriales, en cuyo caso la medición no será exacta. Los anteriores tiempos de respuesta corresponden a globos de 15 cm de diámetro con termómetros de mercurio convencionales. Pueden acortarse utilizando sensores de menor capacidad térmica o reduciendo el diámetro del globo, en cuyo caso la ecuación anterior deberá modificarse para tener en cuenta esta diferencia en el diámetro.
Para el cálculo del índice WBGT se utiliza directamente la temperatura del globo negro. Es por tanto esencial utilizar un globo de 15 cm de diámetro. No obstante, pueden utilizarse otros índices basados en la temperatura radiante media, en cuyo caso podrá utilizarse un globo de menor tamaño para reducir el tiempo de respuesta, siempre que se modifique la anterior ecuación para tener este hecho en cuenta. La norma ISO 7726
(1985) permite una exactitud de 2 ºC en la medición de tr entre
10 y 40 ºC, y 5 ºC fuera de ese rango.

domingo, 17 de julio de 2011

Tuberías

El agua fluye a través de una red de tuberías, normalmente suspendidas del techo, dotadas de rociadores cada cierta distancia. Las tuberías de los sistemas de rociadores deben poder resistir una presión de trabajo no inferior a 1.200 kPa. En los sistemas de tuberías al aire, las fijaciones deben ser atornilladas, de pestaña, de junta mecánica o soldada.

sábado, 16 de julio de 2011

Válvulas de control

Las válvulas de control deben mantenerse siempre en posición abierta. A menudo, la supervisión de las válvulas de control se realiza con un sistema automático de alarma, mediante disposi- tivos que, cuando detectan una válvula cerrada, activan una señal de aviso en el panel de control del sistema de alarma contra incendios. Si no es posible realizar este tipo de control, deben bloquearse las válvulas en la posición abierta.

viernes, 15 de julio de 2011

Suministro de agua

Un sistema automático de rociadores debe disponer de agua en cantidad, presión y volumen suficientes para garantizar un funcionamiento fiable en cualquier momento. Si el suministro municipal de agua no reúne estos requisitos, deberá instalarse un depósito o bomba que asegure el suministro.

jueves, 14 de julio de 2011

Seguridad en centrales nucleares (OIEA Safety Series nº 75, INSAG-3)

El objetivo es proteger a los seres humanos y al medio ambiente de cualquier tipo de emisión de materiales radiactivos. A tal fin, es necesario aplicar una serie de medidas en las fases de diseño, construcción, funcionamiento y desmantelamiento de las centrales nucleares.
La seguridad de las centrales nucleares depende fundamentalmente del principio de “defensa en profundidad”: es decir, de la existencia simultánea de varios sistemas y mecanismos diferentes diseñados para compensar errores y deficiencias técnicas o humanas. En concreto, los materiales radiactivos están separados del medio ambiente por una serie de barreras sucesivas. En los reactores de producción de energía nuclear, la última de estas barreras es la estructura de contención (inexistente en la central de Chernóbil, pero presente en Three Mile Island). Para evitar que se rompan estas barreras y limitar las consecuencias de posibles rupturas, deben aplicarse tres medidas de seguridad a lo largo de toda la vida operativa de la central: control de la reacción nuclear, refrigeración del combustible y contención del material radiactivo.
Otro principio esencial de la seguridad es el “análisis de la experiencia”: es decir, la utilización de información resultante de todo tipo de sucesos ocurridos en otras centrales para aumentar la seguridad de la central. Así, el análisis de los accidentes de Three Mile Island y Chernóbil ha conducido a la introducción de modificaciones para garantizar que no se produzcan acci- dentes similares en otros lugares.
Por último, cabe señalar que se han realizado importantes esfuerzos para potenciar una cultura de la seguridad, es decir,una cultura que responda de forma continuada a las necesidades de la seguridad en la organización, la actividad y la práctica de la central, así como en los comportamientos personales. Para aumentar la visibilidad de los incidentes y accidentes en centrales nucleares, se ha desarrollado una escala internacional de accidentes nucleares (INES), idéntica en principio a las utilizadas para medir la gravedad de fenómenos naturales como terremotos y vientos (Tabla 39.30). Ahora bien, dicha escala no permite evaluar la seguridad de una central o establecer compa- raciones a escala internacional.



miércoles, 13 de julio de 2011

Principios de prevención y directrices Principios de seguridad y directrices

Uso industrial y médico de fuentes de radiación Aunque es cierto que todos los accidentes graves de radiación notificados se han producido en centrales nucleares, también el uso de fuentes de radiación en otros contextos ha provocado accidentes con consecuencias graves para los trabajadores o para la población en general. La prevención de este tipo de accidentes es esencial, en particular dado el desalentador pronóstico en caso de exposición a dosis elevadas. La prevención depende de una adecuada formación de los trabajadores y del mantenimiento de un exhaustivo inventario de los ciclos de vida de las fuentes de radiación, lo que incluye información tanto sobre su naturaleza como sobre su ubicación. La OIEA ha elaborado una serie de directrices y recomendaciones de seguridad para la utilización de fuentes de radiación en la industria, la medicina y la investigación (Safety Series nº 102); se trata de aplicar principios similares a los que se exponen más adelante para las centrales nucleares.

martes, 12 de julio de 2011

Efectos psicosociales

La aparición de problemas psicológicos crónicos más o menos graves después de haber sufrido traumas está firmemente estable- cida y ha sido estudiada sobre todo en poblaciones sometidas a catástrofes ambientales como inundaciones, erupciones volcánicas y terremotos. El estrés postraumático es una afección grave, duradera e incapacitadora (APA 1994).
La mayoría de nuestros conocimientos sobre los problemas psicológicos y el estrés provocados por accidentes de radiación proceden de los estudios realizados tras el accidente de Three

Mile Island. En el año que siguió al accidente, se observaron efectos psicológicos inmediatos en la población expuesta, en particular las madres de niños pequeños mostraron mayor sensi- bilidad, ansiedad y depresión (Bromet y cols. 1982). Además, se detectaron más problemas de depresión y ansiedad en los traba- jadores de la central que en los de otra central de energía
(Bromet y cols. 1982). En los años siguientes (es decir, tras la reapertura de la central), alrededor de una cuarta parte de la población estudiada presentó problemas psicológicos relativa- mente importantes. No se observaron diferencias en la frecuencia de los problemas psicológicos entre el resto de la población estudiada y las poblaciones de control (Dew y Bromet 1993). Los problemas psicológicos fueron más frecuentes en las personas que vivían cerca de la central y no disponían de una red de apoyo social, las que tenían un historial anterior de problemas psiquiátricos o las que habían desalojado sus casas en el momento del accidente (Baum, Cohen y Hall 1993).
También se están realizando estudios sobre las poblaciones expuestas al accidente de Chernóbil: el estrés parece ser un aspecto importante de salud pública (por ejemplo, trabajadores de la limpieza y de socorro, y personas que viven en una zona contaminada). Ahora bien, todavía no hay datos fiables sobre la naturaleza, la gravedad, la frecuencia y la distribución de los problemas psicológicos entre las poblaciones objetivo. Entre los factores que deben tenerse en cuenta al evaluar las consecuencias psicológicas y sociales del accidente sobre los habitantes de áreas contaminadas se encuentran las duras condiciones socioeconómicas existentes, la diversidad de los sistemas de compensación disponibles, los efectos de la evacuación y el reasentamiento
(unas 100.000 personas se reinstalaron en los años posteriores al accidente) y los efectos del descenso de la calidad de vida
(por ejemplo, modificación de la alimentación).

jueves, 21 de abril de 2011

Dirección

Las vibraciones pueden producirse en tres direcciones lineales y tres rotacionales. En el caso de personas sentadas, los ejes lineales se  designan  como  eje  x  (longitudinal),  eje  y  (lateral)  y  eje  z
(vertical). Las rotaciones alrededor de los ejes x, y y z se designan   como rx (balanceo), ry (cabeceo) y rz (deriva), respectivamente. Las
vibraciones suelen medirse en la interfase entre el cuerpo y las vibraciones. Los sistemas principales de coordenadas para medir las vibraciones de cuerpo completo y las vibraciones transmitidas a  las  manos  se  exponen  en  los  dos  artículos  siguientes  del capítulo.