jueves, 11 de agosto de 2011

Biodinámica

Como todas las estructuras mecánicas, el cuerpo humano tiene frecuencias de resonancia a las que presenta una respuesta mecá- nica máxima. La explicación de las respuestas humanas a las vibraciones no puede basarse exclusivamente en una sola frecuencia de resonancia. Hay muchas resonancias en el cuerpo, y las frecuencias de resonancia varían de unas personas a otras y en función de la postura. Para describir el modo en que la vibración produce movimiento en el cuerpo suelen utilizarse dos respuestas mecánicas: transmisibilidad e impedancia.

miércoles, 10 de agosto de 2011

VIBRACIONES DE CUERPO COMPLETO

Exposición profesional
Las exposiciones profesionales a las vibraciones de cuerpo completo se dan, principalmente, en el transporte, pero también en algunos procesos industriales. El transporte terrestre, marítimo y aéreo puede producir vibraciones que pueden causar malestar, interferir con las actividades u ocasionar lesiones. En la Tabla 50.1 se ofrece una relación de algunos ambientes que pueden entrañar gran probabilidad de riesgo para la salud.
La exposición más común a vibraciones y choques fuertes suele darse en vehículos todo terreno, incluyendo maquinaria de movimiento de tierras, camiones industriales y tractores agrícolas.

martes, 9 de agosto de 2011

Duración

La respuesta humanas a las vibraciones depende de la duración total de la exposición a las vibraciones. Si las características de la vibración no varían en el tiempo, el valor eficaz de la vibración proporciona una medida adecuada de su magnitud promedio. En tal caso un cronómetro puede ser suficiente para evaluar la dura- ción de la exposición. La intensidad de la magnitud promedio y la duración total pueden evaluarse según las normas expuestas en los siguientes artículos.
Si varían las características de la vibración, la vibración promedio medida dependerá del período durante el que se mida. Además, se cree que la aceleración eficaz infravalora la intensidad de los movimientos que contienen choques o son marcadamente intermitentes.
Muchas exposiciones profesionales son intermitentes, tienen una magnitud variable en cada momento o contienen choques esporádicos. La intensidad de tales movimientos complejos pueden acumularse de manera que dé un peso apropiado a, por ejemplo, períodos cortos de vibración de alta magnitud y períodos largos de vibración de baja magnitud. Para el cálculo de las dosis se utilizan diferentes métodos (véase “Vibraciones de cuerpo completo”; “Vibraciones transmitidas a las manos”, y “Mareo inducido por el movimiento” en este capítulo).


lunes, 8 de agosto de 2011

El principio de precaución o de evitación prudente

Aunque no existe ninguna diferencia real entre estos dos términos, en los debates sobre los campos eléctricos y magnéticos se suele utilizar el de la evitación prudente. Según se ha señalado, puede definirse ésta como la evitación futura, con bajo coste, de la exposición innecesaria mientras exista incertidumbre científica sobre los efectos para la salud. Se ha adoptado en Suecia, pero no en otros países.
En Suecia, cinco organismos gubernamentales (el Instituto de Protección contra la Radiación, la Junta Nacional de Seguridad de la Electricidad, la Junta Nacional de Salud y Bienestar, la Junta Nacional de Higiene y Seguridad en el Trabajo y la Junta Nacional de la Vivienda, Construcción y Planificación) han declarado conjuntamente que “el conocimiento total acumulado hasta ahora justifica la adopción de medidas para reducir la energía de los campos”. Siempre que el coste sea razonable, la política es proteger a las personas de la exposición de larga dura- ción a campos magnéticos de alta intensidad. Durante la instala- ción de nuevos equipos o de nuevas líneas de alta tensión que puedan provocar exposiciones a campos magnéticos intensos, han de elegirse soluciones que determinen exposiciones de menor intensidad, siempre que no impliquen costes elevados o grandes inconvenientes. Según el Instituto de Protección contra la Radiación, por lo general es posible adoptar medidas para reducir el campo magnético cuando los niveles de exposición exceden de los habituales en un factor superior a diez, siempre que tales reducciones puedan hacerse con un coste razonable. En las situaciones en que los niveles de exposición derivados de las instalaciones existentes no sobrepasan los niveles habituales en un factor de diez, debe evitarse realizar una costosa reforma. Ni que decir tiene que este concepto de prevención ha sido criti- cado por muchos expertos de diferentes países, por ejemplo, por expertos de la industria de suministro eléctrico.

domingo, 7 de agosto de 2011

Normas y directrices para la restricción de la exposición de acuerdo con el sistema centrado en la salud

En las guías internacionales, los límites para las restricciones de exposición a los campos están varios órdenes de magnitud por encima de los valores que puede medirse en las líneas eléctricas del tendido aéreo y los que se dan en las profesiones eléc- tricas. En 1990, la Asociación Internacional de Protección contra la Radiación (International Radiation Protection Association, IRPA) emitió unas Guías sobre límites de exposición a campos eléctricos y magnéticos de 50/60 Hz, que han sido adoptadas como base de muchas normas nacionales. Dado que desde entonces se han publicado nuevos e importantes estudios, y en 1993 la Comisión Internacional de Protección contra la Radiación no Ionizante
(International Commission on Non-Ionizing Radiation Protection, ICNIRP), emitió un anexo. En 1993 se realizaron también en el Reino Unido valoraciones de riesgos en concordancia con las de la IRPA.
Estos documentos ponen de relieve que el estado actual de los conocimientos científicos no garantiza la limitación de los niveles de exposición para el público y la población laboral al nivel de T, y que se necesitan más datos para confirmar si existen o no riesgos para la salud. Las directrices de la IRPA y la ICNIRP se basan en los efectos de las corrientes inducidas por campos en el cuerpo, y que corresponden a las que normal- mente se miden en éste (hasta 10 mA/m2 aproximadamente). Se recomienda limitar la exposición de origen profesional a los campos magnéticos de 50/60 Hz a 0,5 mT en el caso de exposi- ción durante toda la jornada y a 5 mT en el caso de exposi- ciones cortas de hasta dos horas. Asimismo, se recomienda limitar la exposición a los campos eléctricos a 10 y 30 kV/m. El límite de 24 horas para el público se fija en 5 kV/m y 0,1 mT. Estas consideraciones sobre la reglamentación de la exposi- ción se basan exclusivamente en informes sobre el cáncer. En los estudios de otros posibles efectos relacionados con los campos eléctricos y magnéticos (por ejemplo, trastornos de la reproduc- ción y trastornos neurológicos y del comportamiento), los resul- tados no se consideran en general lo bastante claros y consistentes como para servir de base científica a la restricción de la exposición.

sábado, 6 de agosto de 2011

Política apropiada Sistemas de protección

En general, son varios los sistemas de protección que han de tenerse en cuenta en las normas, directrices y políticas. El más común es el sistema centrado en la salud, que trata de detectar un efecto específico perjudicial para la salud a un determinado nivel de exposición, independientemente del tipo de exposición, sea éste físico o químico. Un segundo sistema sería el de optimización de un peligro conocido y aceptado, sin necesidad de ningún umbral por debajo del cual sea inexistente el riesgo. En este sistema encajaría la radiación ionizante. Un tercer sistema contempla los peligros o riesgos en los que no se han demostrado con certeza razonable las relaciones causales entre exposición y consecuencias, pero en relación con los cuales existe una preocu- pación general por los posibles riesgos. Este último es el que inspira el denominado principio de precaución, o más recientemente, de evitación prudente , que puede resumirse como evitar en el futuro, con bajo coste, la exposición innecesaria en ausencia de certeza científica. Al abordar la exposición a los campos eléctricos y magnéticos desde esta perspectiva, se han presentado estrategias sistemáticas, por ejemplo, sobre el modo de tender las futuras líneas de alta tensión, de configurar los lugares de trabajo o de diseñar los aparatos electrodomésticos para reducir al mínimo la exposición.
Evidentemente, el segundo de los sistemas mencionados, el de optimización, no es aplicable en lo que atañe a las restricciones de los campos eléctricos y magnéticos, sencillamente porque no se conocen ni están aceptados como riesgos. En cambio, los otros dos sistemas son en la actualidad objeto de consideración.

viernes, 5 de agosto de 2011

Naturaleza y mecanismos de los efectos biológicos de la radiación

Deposición de energía. A diferencia de otras formas de radiación, la radiación ionizante es capaz de depositar suficiente energía localizada para arrancar electrones de los átomos con los que interactúa. Así, cuando la radiación colisiona al azar con átomos y moléculas al atravesar células vivas, da lugar a iones y radicales libres que rompen los enlaces químicos y provoca otros cambios moleculares que dañan las células afectadas. La distribución espacial de los fenómenos ionizantes depende del factor de ponderación radiológica, wR de la radiación (véanse la Tabla 48.1 y la Figura 48.3).

jueves, 4 de agosto de 2011

BIOLOGIA RADIOLOGICA Y EFECTOS • BIOLOGICOS

Tras su descubrimiento por Roentgen en 1895, los rayos X fueron introducidos con tanta rapidez para el diagnóstico y trata- miento de las enfermedades que casi en seguida comenzaron a encontrarse lesiones debidas a exposición excesiva a la radiación entre los primeros radiólogos, que todavía no eran conscientes de sus riesgos (Brown 1933). Las primeras lesiones fueron sobre todo reacciones cutáneas en las manos de quienes trabajaban con los primeros equipos de radiología, pero ya en el primer decenio se habían comunicado otros tipos de lesión, incluidos los primeros cánceres atribuidos a la radiación (Stone 1959).
En el curso del siglo transcurrido desde estos primeros hallazgos, el estudio de los efectos biológicos de la radiación ionizante ha recibido un impulso permanente como consecuencia del uso cada vez mayor de la radiación en medicina, ciencia e industria, así como de las aplicaciones pacíficas y militares de la energía atómica. El resultado es que los efectos biológicos de la radiación se han investigados más a fondo que los de prácticamente cualquier otro agente ambiental. El desarrollo de los conocimientos sobre los efectos de la radiación ha determinado el perfeccionamiento de medidas para proteger la salud humana contra muchos otros peligros medioambientales, además de la radiación.

miércoles, 3 de agosto de 2011

Factor de ponderación tisular wT.

Representa la contribución del tejido u órgano T al efecto lesivo total debido a todos los efectos estocásticos resultantes de la irradiación uniforme de todo el cuerpo. Se utiliza porque la probabilidad de efectos estocásticos debidos a una dosis equivalente depende del tejido u órgano irradiado. Una dosis equivalente uniforme por todo el cuerpo debe originar una dosis efectiva numéricamente igual a la suma de las dosis eficaces de todos los tejidos y órganos del cuerpo. Por lo tanto, la suma de todos los factores de ponderación tisulares se iguala a la unidad. En la Tabla 48.2 se ofrecen los valores de los factores de ponderación tisular.




martes, 2 de agosto de 2011

Procedimientos de medición

Existen dos criterios básicos de la medición del ruido en el trabajo:
• Puede medirse la exposición de cada trabajador, de un trabajador tipo o de un trabajador representativo. El dosímetro de ruido es el instrumento preferible a estos efectos.
• Pueden medirse niveles de ruido en varias áreas, creándose un mapa de ruido para la determinación de áreas de riesgo. En este caso, se utilizaría un sonómetro para tomar mediciones en puntos regulares de una red de coordenadas.

lunes, 1 de agosto de 2011

El método de precisión

Este método es necesario en situaciones complejas, en las que se requiere la descripción más minuciosa del problema de ruido. Las mediciones globales del nivel sonoro se complementan con medi- ciones en banda de octava o de tercio de octava y se registran historiales de intervalos de tiempo apropiados en función de la duración y las fluctuaciones del ruido. Por ejemplo, puede ser necesario medir los niveles pico de los impulsos utilizando el dispositivo de “captación de pico” del instrumento, o medir niveles de infrasonidos o ultrasonidos, lo que requiere capaci- dades de medición de frecuencias especiales, la directividad del micrófono, etc.
Quienes utilicen el método de precisión deben asegurarse de que el margen dinámico del instrumento es suficiente para evitar sobrecargas al medir impulsos y de que la respuesta en frecuencia es suficientemente amplia si se van a medir infraso- nidos o ultrasonidos. El instrumento debe ser capaz de medir

frecuencias de hasta 2 Hz en infrasonidos y de hasta 16 kHz como mínimo en ultrasonidos, con micrófonos que sean suficien- temente pequeños.
Si la persona encargada de realizar las mediciones de ruido es inexperta, puede serle de utilidad dar los siguientes pasos de
“sentido común”:
1. Escuchar las principales características del ruido que se vaya
a medir (características temporales, como por ejemplo si es constante, intermitente o impulsivo; características de frecuencia, como las del ruido de banda ancha, tonos predo- minantes, infrasonidos, ultrasonidos, etc.). Hay que anotar las características más destacadas.
2. Elegir los instrumentos más adecuados (tipo de sonómetro, dosímetro, filtros, registrador de cinta, etc.).
3. Comprobar la calibración y el funcionamiento del instru- mento (baterías, datos de calibrado, correcciones del micró- fono, etc.).
4. Anotar o realizar un esquema (si se utiliza un sistema) de los instrumentos, indicando el modelo y el número de serie.
5. Realizar un esquema del entorno de ruido que se vaya a medir, indicando las principales fuentes de ruido y las dimen- siones y características importantes del recinto o ambiente exterior.
6. Medir el ruido y anotar el nivel medido para cada red de ponderación o para cada banda de frecuencias. Anotar también la respuesta del medidor (“lenta”, “rápida”, “impulsivo”, etc.), y la incertidumbre del medidor (p. ej., más o menos 2 dB).
Si las mediciones se realizan al aire libre, deberán anotarse si se consideran importantes los datos meteorológicos pertinentes, como el viento, la temperatura y la humedad. En las mediciones al aire libre, e incluso en algunas mediciones en recintos cerrados, deberá utilizarse siempre un guardaviento. Han de seguirse siempre las instrucciones del fabricante para evitar la influencia de factores tales como el viento, la humedad, el polvo
y los campos eléctricos y magnéticos, que pueden afectar a las mediciones.