sábado, 31 de diciembre de 2011

EL ESPECTRO ELECTROMAGNETICO: • CARACTERISTICAS FISICAS BASICAS

La forma más conocida de energía electromagnética es la luz del sol. La frecuencia de la luz solar (luz visible) es la línea divisoria entre la radiación ionizante (rayos x, rayos cósmicos), más potente y de frecuencias más altas, y la radiación no ionizante, más benigna y de frecuencias más bajas. Hay un espectro de radiación no ionizante. A los efectos de este capítulo, en el extremo superior, justo por debajo de la luz visible, está la radiación infrarroja. Más abajo se encuentra la amplia gama de radiofrecuencias, que incluye (en orden descendente) las microondas, la radio celular, la televisión, la radio FM y AM, las ondas cortas utilizadas en calen- tadores dieléctricos y de inducción y, en el extremo inferior, los campos con frecuencia de red eléctrica. El espectro electromag- nético se representa en la Figura 49.1.
Del mismo modo que la luz visible o el sonido impregnan nuestro entorno, el espacio en que vivimos y trabajamos, también lo hace la energía de los campos electromagnéticos. Análogamente, igual que la mayor parte de la energía acústica a la que estamos expuestos la crea la actividad humana, lo mismo ocurre con la energía electromagnética: desde los débiles niveles emitidos por los electrodomésticos que usamos a diario (los que permiten que funcionen nuestros aparatos de radio y televisión) hasta los elevados niveles que aplican los médicos con fines beneficiosos: por ejemplo, en la diatermia (tratamientos por calor). En general, la intensidad de tal energía disminuye rápida- mente con la distancia a la fuente. Los niveles naturales de estos campos en el entorno son bajos.
La radiación no ionizante (RNI) engloba toda la radiación y los campos del espectro electromagnético que no tienen sufi- ciente energía para ionizar la materia. Es decir, la RNI es incapaz de impartir suficiente energía a una molécula o un átomo para alterar su estructura quitándole uno o más electrones. La división entre la RNI y la radiación ionizante suele establecerse en una longitud de onda de 100 nanómetros aproximadamente.
Al igual que cualquier forma de energía, la energía RNI tiene el potencial necesario para interactuar con los sistemas biológicos, y las consecuencias pueden ser irrelevantes, perjudiciales en diferentes grados o beneficiosas. En el caso de la radiofrecuencia (RF) y la radiación de microondas, el principal mecanismo de interacción es el calentamiento, pero en la región de baja frecuencia del espectro, los campos de alta intensidad pueden inducir corrientes en el cuerpo y por ello resultar peligrosos. No obstante, se desconocen los mecanismos de interacción de las intensidades de los campos de bajo nivel.

viernes, 30 de diciembre de 2011

Conclusiones Campo Electromagnetico

En el presente artículo se ha resumido lo que sabemos acerca de los posibles efectos para la salud de los campos eléctricos y magnéticos, y de lo que aún requiere ser investigado. No se ha dado ninguna respuesta a la pregunta de la política que deba adoptarse, si bien se han presentado sistemas de protección opcionales. A este respecto, parece claro que la base de datos científica disponible es insuficiente para desarrollar límites de exposición en el nivel de T, lo que a su vez significa que no hay motivos para efectuar costosas intervenciones con estos niveles de exposición. La cuestión de si debería adoptarse o no alguna forma de estrategia precautoria (por ej., la evitación prudente) es algo que deben decidir las autoridades responsables de la salud pública y la salud en el trabajo de los distintos países. Si no se adopta tal estrategia, normalmente no se impondrá ninguna restricción de la exposición, porque los límites umbrales basados en la salud están muy por encima de la exposición pública y profesional. Así pues, si bien es cierto que en la actualidad hay diferentes opiniones en lo que se refiere a normas, guías y políticas, existe un consenso general en cuanto a la necesidad de seguir investigando para conseguir una base sólida de cara a futuras acciones.

jueves, 29 de diciembre de 2011

Efectos sobre los cromosomas

Las lesiones por radiación del aparato genético pueden causar también cambios en el número y la estructura de los cromosomas, modificaciones cuya frecuencia se ha observado que aumenta con la dosis en trabajadores expuestos, en supervivientes de la bomba atómica y en otras personas expuestas a la radiación ionizante. La relación dosis-respuesta para las aberraciones cromosómicas en linfocitos de sangre humana (Figura 48.4) se ha determinado con bastante exactitud, de manera que la frecuencia de aberraciones en esas células puede servir de dosímetro biológico útil (OIEA 1986). 


miércoles, 28 de diciembre de 2011

Efectos sobre los genes.

El daño del ADN que queda sin reparar o es mal reparado puede manifestarse en forma de mutaciones, cuya frecuencia parece aumentar como una función lineal de la dosis, sin umbral, en alrededor de 10–5 a 10–6 por locus y por Gy (NAS 1990). El hecho de que la tasa de mutaciones parezca ser proporcional a la dosis se considera indicativo de que una sola partícula ionizante que atraviese el ADN es suficiente, en principio, para causar una mutación (NAS 1990). En las víctimas del
accidente de Chernóbil, la relación dosis-respuesta de las mutaciones de la glicoforina de células de la médula ósea es muy similar a la observada en supervivientes de la bomba atómica (Jensen, Langlois y Bigbee 1995).

martes, 27 de diciembre de 2011

Efectos sobre el ADN.

Cualquier molécula de la célula puede ser alterada por la radiación, pero el ADN es el blanco biológico más crítico, debido a la redundancia limitada de la informa- ción genética que contiene. Una dosis absorbida de radiación lo bastante grande para matar la célula media en división
—2 gray (Gy)— basta para originar centenares de lesiones en sus moléculas de ADN (Ward 1988). La mayoría de estas lesiones son reparables, pero las producidas por una radiación ionizante concentrada (por ejemplo, un protón o una partícula alfa) son en general menos reparables que las generadas por una radiación ionizante dispersada (por ejemplo, un rayo X o un rayo gamma) (Goodhead 1988). Por lo tanto, las radiaciones ionizantes concentradas (alta TLE) tienen por lo común un mayor efecto biológico relativo (EBR) que las radiaciones ionizantes dispersadas (baja TLE) en casi todas las formas de lesión
(CIPR 1991).

lunes, 26 de diciembre de 2011

TECNICAS DE CONTROL DEL RUIDO

Idealmente, el medio más eficaz de control del ruido es evitar desde el principio que la fuente de ruido entre en la fábrica, implantando un programa eficaz de “adquisición de productos sin ruido” para introducir en el lugar de trabajo bienes de equipo diseñados para producir un bajo nivel de ruido. Para llevar a cabo un programa de este tipo, es preciso elaborar unas normas claras y bien redactadas que limiten las características de emisión de ruido de los nuevos equipos, instalaciones y procesos de fabricación. Un buen programa también incluye la vigilancia y el mantenimiento.
Una vez instalados los equipos e identificado el exceso de ruido por mediciones del nivel sonoro, el problema del control del ruido presenta matices más complejos. Sin embargo, existen soluciones técnicas que pueden aplicarse a los equipos existentes. Además, suele haber más de una opción de control del ruido para cada problema. Por consiguiente, para el responsable del programa de control es importante determinar los medios de reducción del ruido más viables y económicos en cada situación concreta.

domingo, 25 de diciembre de 2011

Criterios de exposición

La elección de los criterios de exposición al ruido dependerá del objetivo a conseguir; por ejemplo, la prevención de la pérdida auditiva o la prevención del estrés y la fatiga. La exposición máxima permisible, en términos de niveles medios de ruido diario, pueden variar, según el país, de 80 a 85 ó 90 dBA, con factores de acumulación de 3, 4 o 5 dBA. En algunos países, como Rusia, los niveles de ruido permisibles se establecen entre 50 y 80 dBA, en función del tipo de trabajo realizado y teniendo en cuenta la carga de trabajo física y mental. Por ejemplo, los niveles admisibles para trabajar con ordenadores o para realizar trabajos administrativos exigentes van de 50 a 60 dBA. (Para más información sobre criterios de exposición, ver el artículo “Normas y reglamentaciones” en este mismo capítulo.)

sábado, 24 de diciembre de 2011

Evaluación de la exposición del trabajador

Para evaluar el riesgo de pérdida auditiva debido a la exposición a ruidos específicos, el lector deberá consultar la norma internacional ISO 1999 (1990). Esta norma contiene un ejemplo de esta evaluación de riesgos en su anexo D.
La exposición al ruido debe medirse cerca del oído del trabajador y, para evaluar el riesgo derivado de la exposición del trabajador, no han de realizarse restas que tengan en cuenta la atenuación proporcionada por los protectores auditivos. Si se adopta esta cautela es porque existen sólidas pruebas de que la atenuación proporcionada por los protectores auditivos, tal como se llevan en el trabajo, suele ser inferior a la mitad de la calculada por el fabricante. De hecho, los datos del fabricante se obtienen en condiciones de laboratorio y estos dispositivos no se suelen colocar ni llevar de modo tan eficaz en la práctica. Por el momento, no existe ninguna norma internacional que realice una estimación de la atenuación que ofrecen los protectores auditivos tal como se llevan en la práctica, pero una buena norma empírica sería dividir los valores de laboratorio por la mitad.
En algunas circunstancias, sobre todo en tareas difíciles o trabajos que exigen concentración, puede ser importante minimizar los efectos del estrés o la fatiga relacionados con la exposición al ruido, adoptando medidas de control del ruido. Esta regla puede ser aplicable incluso con niveles de ruido moderados (por debajo de 85 dBA), cuando haya poco riesgo de deterioro auditivo pero el ruido sea molesto o agobiante. En estos casos, es útil realizar evaluaciones de sonoridad aplicando la norma ISO 532 (1975), “Método de cálculo del nivel de sonoridad”. Puede realizarse una estimación de la interferencia con comunicación hablada de acuerdo con la norma ISO 2204 (1979), aplicando el “índice de articulación”, o más sencillamente, midiendo los niveles de ruido de las bandas de octava de 500, 1.000 y 2.000 Hz, para obtener el “nivel de interferencia conversacional”.

viernes, 23 de diciembre de 2011

Iluminación general localizada

Es un tipo de iluminación con fuentes de luz instaladas en el techo y distribuidas teniendo en cuenta dos aspectos: las características de iluminación del equipo y las necesidades de iluminación de cada puesto de trabajo. Está indicado para aquellos espacios o áreas de trabajo que necesitan un alto nivel de iluminación y requiere conocer la ubicación futura de cada puesto de trabajo con antelación a la fase de diseño.

jueves, 22 de diciembre de 2011

Iluminación general e iluminación localizada de apoyo

Se trata de un sistema que intenta reforzar el esquema de la iluminación general situando lámparas junto a las superficies de trabajo. Las lámparas suelen producir deslumbramiento y los reflectores deberán situarse de modo que impidan que la fuente de luz quede en la línea directa de visión del trabajador. Se recomienda utilizar iluminación localizada cuando las exigencias visuales sean cruciales, como en el caso de los niveles de iluminación de 1.000 lux o más. Generalmente, la capacidad visual del trabajador se deteriora con la edad, lo que obliga a aumentar el nivel de iluminación general o a complementarlo con iluminación localizada. En la Figura 46.14 se aprecia claramente este fenómeno.

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Iluminación general uniforme

En este sistema, las fuentes de luz se distribuyen uniformemente sin tener en cuenta la ubicación de los puestos de trabajo. El nivel medio de iluminación debe ser igual al nivel de iluminación necesario para la tarea que se va a realizar. Son sistemas utilizados principalmente en lugares de trabajo donde no existen puestos fijos.
Debe tener tres características fundamentales: primero, estar equipado con dispositivos antibrillos (rejillas, difusores, reflectores, etcétera); segundo, debe distribuir una fracción de la luz hacia el techo y la parte superior de las paredes, y tercero, las fuentes de luz deben instalarse a la mayor altura posible, para minimizar los brillos y conseguir una iluminación lo más homo- génea posible (véase la Figura 46.13).

martes, 20 de diciembre de 2011

Generación de iones negativos

Es un método utilizado para eliminar partículas suspendidas en el aire y, en opinión de algunos autores, para crear ambientes más saludables. Todavía se está estudiando la eficacia de este método como medio para reducir malestares o enfermedades

lunes, 19 de diciembre de 2011

Precipitación electrostática

Se trata de un método útil para controlar partículas. Los equipos de esta clase funcionan ionizando las partículas y eliminándolas después de la corriente de aire por medio de un electrodo acumulador que las atrae y captura. La ionización se produce cuando el efluente contaminado pasa por el campo eléctrico generado por una alta tensión aplicada entre los electrodos de acumulación y descarga. La tensión se obtiene por medio de un generador de corriente continua. El electrodo acumulador cuenta con una superficie grande y suele tener una carga positiva, mientras que el electrodo de descarga es un cable con carga negativa.
Los factores más importantes que afectan a la ionización de partículas son el estado del efluente, su descarga y las características de las partículas (tamaño, concentración, resistividad, etc.). La efectividad de la captura aumenta con la humedad y con el tamaño y la densidad de las partículas, y disminuye al aumentar la viscosidad del efluente.
La principal ventaja de estos dispositivos es que son muy eficaces para recoger sólidos y líquidos, incluso cuando las partículas son muy finas. Además, estos sistemas pueden utilizarse con grandes volúmenes y a altas temperaturas. La pérdida de presión es mínima. Los inconvenientes son su alto coste inicial, sus necesidades de espacio y los riesgos de seguridad que plantean por las altas tensiones que requieren, especialmente si se utilizan en aplicaciones industriales.
Los precipitadores electrostáticos tienen toda una gama de aplicaciones, desde la reducción de las emisiones de partículas en ámbitos industriales, hasta la mejora de la calidad del aire en el interior de domicilios privados. En este último caso se trata de dispositivos más pequeños, que funcionan con tensiones de entre 10.000 y 15.000 voltios. Normalmente disponen de sistemas equipados con reguladores automáticos de tensión que permiten aplicar siempre la tensión suficiente para producir la ionización sin provocar descargas entre ambos electrodos.

domingo, 18 de diciembre de 2011

Filtración de partículas Parte II

La eficacia de un filtro expresa el número de partículas retenidas por el volumen de aire filtrado. Es el mismo valor que se utiliza para caracterizar filtros que también retienen partículas más finas. En este caso, se hace pasar a través del mismo una corriente de aerosol atmosférico compuesto de partículas de entre 0,5 y 1 m de diámetro. La cantidad de partículas capturadas se mide con un opacímetro, aparato que mide la opacidad provocada por el sedimento. El ensayo con Dioctilftalato (DOP) es utilizado para clasificar los filtros de aire particulado de alta eficacia (HEPA). La prueba se realiza con un aerosol fabricado por evaporación y condensación de dioctilftalato, que produce partículas de 0,3 m de diámetro. El método se basa en la propiedad fotodispersora de las gotas de dioctilftalato: si some- temos el filtro a esta prueba, la intensidad de la luz dispersada será proporcional a la concentración superficial de este material y podrá medirse la penetración del filtro por la intensidad relativa de la luz dispersada antes y después de filtrar el aerosol. Para que un filtro obtenga la denominación HEPA, debe demos- trar una eficacia superior al 99,97 % en esta prueba.
Aunque existe una relación directa entre ellos, los resultados de los tres métodos no son directamente comparables. La eficacia de todos los filtros disminuye a medida que se van obstruyendo y entonces pueden convertirse en fuente de olores y contaminación. La vida útil de un filtro de alta eficacia puede alargarse en gran medida colocando uno o varios filtros de menor rango delante del filtro de alta eficacia. En la Tabla 45.5 se presentan los valores de rendimiento inicial, final y promedio de diferentes filtros, conforme a los criterios establecidos por la norma ASHRAE 52-76 para partículas de 0,3 m de diámetro.

sábado, 17 de diciembre de 2011

Formaldehído

El formaldehído es un contaminante importante del aire interior, y debido a sus propiedades químicas y tóxicas se recomienda una evaluación individualizada. Existen diferentes métodos para detectar el formaldehído en el aire, todos ellos basados en la toma de muestras para un análisis posterior, con fijación activa o por difusión. El método de captura más apropiado dependerá del tipo de muestra (emisión o inmisión) utilizado y de la sensibilidad del método analítico. Los métodos tradicionales se basan en la obtención de una muestra haciendo borbotear el aire a través de agua destilada o de una solución de bisulfato sódico al 1 % a 5 C, y a continuación analizándolo por métodos espectrofluoro- métricos. Durante su almacenamiento, también debe conservarse a 5 C. El SO2 y los componentes del humo del tabaco pueden interferir en el análisis. Cada vez se utilizan con mayor frecuencia en el análisis del aire interior sistemas o métodos activos que capturan contaminantes por difusión con adsorbentes sólidos; constan de una base que puede ser un filtro o un sólido saturado con un reactivo, como el bisulfato sódico o la 2,4-difenilhidrazina. Los métodos que toman el contaminante por difusión, además de las ventajas generales propias del método, son más sensibles que los métodos activos debido a que el tiempo necesario para obtener la muestra es mayor (Freixa 1993).

viernes, 16 de diciembre de 2011

Ozono

El ozono, O , sólo puede encontrarse en ambientes de interior en situaciones especiales en las que se genera de forma continua, ya que se degrada rápidamente. Se determina mediante métodos de lectura directa, tubos colorimétricos y métodos de quimioluminiscencia. También puede detectarse por métodos utilizados en higiene industrial que pueden adaptarse fácilmente para el aire interior. La muestra se obtiene con una solución absorbente de yoduro potásico en un medio neutral y a continuación se somete a análisis espectrofotométrico.

jueves, 15 de diciembre de 2011

Dióxido de azufre

Para determinar el dióxido de azufre, SO2, en un ambiente interior se utiliza un método espectrofotométrico. Se hace borbotear la muestra de aire a través de una solución de tetracloromercuriato para formar un complejo estable que, a su vez, se determina espectrofotométricamente después de reaccionar con pararosanilina. Otros métodos se basan en la fotometría de llama y en la fluorescencia ultravioleta pulsante, y también existen métodos basados en la derivación de la determinación antes del análisis espectroscópico. Es un tipo de detección utilizado para monitores de aire atmosférico, aunque no es adecuado para el análisis del aire interior debido a la falta de especificidad y a que muchos de estos monitores requieren un sistema de ventilación para eliminar los gases que generan. Dado que se han reducido enormemente las emisiones de SO2 y a que este compuesto no es considerado un contaminante importante del aire interior, el desarrollo de monitores para su detección no ha avanzado mucho. Ahora bien, existen instrumentos portátiles en el mercado que pueden detectar el SO2 basándose en la detección de pararosanilina (Freixa 1993).

miércoles, 14 de diciembre de 2011

EVALUACION DEL ESTRES POR CALOR E INDICES DE ESTRES POR CALOR (II)

En general, los mecanismos del estrés por calor se conocen bien y las prácticas de trabajo para ambientes cálidos están bien establecidas. Entre ellas se incluyen: conocimiento de los signos de advertencia de estrés por calor, programas de aclimatación y rehidratación. No obstante, el gran número de accidentes que siguen produciéndose sugiere la necesidad de repasar estos conocimientos.
En 1964, Leithead y Lind realizaron una gran encuesta y concluyeron que los trastornos por calor se producen por una o más de las razones siguientes:
1. la existencia de factores como deshidratación o falta de aclimatación;
2. apreciación inadecuada de los peligros del calor, ya sea por parte de las autoridades supervisoras o por las personas en situación de riesgo,
3. circunstancias accidentales o imprevistas que causan la expo- sición a un gran estrés por calor.

Los autores concluyeron que muchas de las muertes podían atribuirse a negligencia o falta de consideración y que cuando llegan a producirse trastornos, es muy importante disponer de todo lo necesario para administrar un tratamiento correcto y rápido.

martes, 13 de diciembre de 2011

EVALUACION DEL ESTRES POR CALOR E INDICES DE ESTRES POR CALOR (I)

El estrés por calor se produce cuando el entorno de una persona (temperatura del aire, temperatura radiante, humedad y velocidad del aire), su ropa y su actividad interactúan para producir una tendencia a que la temperatura corporal aumente. El sistema de regulación térmica del organismo responde para aumentar la pérdida de calor. Tal respuesta puede ser poderosa y eficaz, pero puede también producir un estrés en el organismo que origine molestias, enfermedades o incluso la muerte. Por tanto, es importante evaluar los ambientes calurosos para garantizar la salud y la seguridad de los trabajadores.
Los índices de estrés por calor proporcionan herramientas para evaluar ambientes calurosos y estimar el estrés térmico al que pueden verse expuestos los trabajadores. Los valores límite basados en los índices de estrés por calor indicarán cuando este estrés puede llegar a ser inaceptable.
En general, los mecanismos del estrés por calor se conocen bien y las prácticas de trabajo para ambientes cálidos están bien establecidas. Entre ellas se incluyen: conocimiento de los signos de advertencia de estrés por calor, programas de aclimatación y rehidratación. No obstante, el gran número de accidentes que siguen produciéndose sugiere la necesidad de repasar estos conocimientos.

lunes, 12 de diciembre de 2011

Anemómetros de hilo caliente

Son instrumentos complementarios a los anemómetros de aspas giratorias, ya que su rango dinámico se extiende básicamente de 0 a 1 m/s. Proporcionan una estimación instantánea de la velocidad en un punto del espacio; por consiguiente, es necesario utilizar valores medios en el tiempo y en el espacio. Son instrumentos muy sensibles también a la dirección del aire, de manera que los anteriores comentarios sirven igual en este caso. Finalmente, la medición es sólo correcta desde el momento en que la temperatura del instrumento alcanza la del ambiente que tiene que medirse.

domingo, 11 de diciembre de 2011

Sistemas especiales de extinción con agua y con aditivos en el agua - Sistemas de pulverización de agua

Los sistemas de pulverización de agua aumentan la efectividad de ésta al dividirla en gotas pequeñas, lo que genera una mayor superficie de contacto con el fuego y un aumento relativo de la capacidad de absorción de calor. A menudo se opta por este sistema para mantener fríos grandes depósitos a presión, como las esferas de butano, cuando existe peligro de incendio en una zona adyacente. Es similar al sistema de rociadores, aunque aquí todos los rociadores están abiertos y para abrir las válvulas de control se utiliza un sistema independiente de detección o se realiza la operación de forma manual. Esto permite que el agua fluya a través de la red de canalización hasta llegar a todos los dispositivos de pulverización de salida del sistema de tuberías.

sábado, 10 de diciembre de 2011

Sistemas especiales de extinción

Los sistemas especiales de extinción se utilizan cuando los rociadores de agua no aportan una protección adecuada o cuando resulta inaceptable el riesgo de daño por agua. En muchos casos en que el daño por agua es problemático, pueden utilizarse sistemas especiales de extinción junto con sistemas de rociadores de agua, estando diseñados los primeros para activarse en la fase inicial del incendio.

viernes, 9 de diciembre de 2011

Rociadores

Un rociador consta de un orificio, que normalmente se mantiene cerrado por un elemento liberador sensible a la temperatura, y un deflector de pulverización. El diseño de la descarga de agua y los requisitos de espaciado de cada rociador garantizan una cobertura total del riesgo protegido.

jueves, 8 de diciembre de 2011

SALUD EN EL TRABAJO Y • MEDIDAS DE SEGURIDAD EN AREAS AGRARIAS CONTAMINADAS POR RADIONUCLIDOS: LA EXPERIENCIA DE CHERNOBIL (I)

En general, la contaminación masiva de tierras agrícolas por radionúclidos se produce por accidentes graves en empresas pertenecientes a la industria nuclear o en centrales nucleares. Accidentes de este tipo se produjeron en Windscale (Inglaterra) y al sur de los Urales (Rusia). El accidente más grave tuvo lugar en abril de 1986, en la central nuclear de Chernóbil: provocó una intensa contaminación del suelo en varios miles de kilómetros cuadrados.
Los principales factores que influyen en los efectos de un accidente radiológico en zonas agrarias son los siguientes:
• el hecho de que la radiación se deba a una sola exposición o a una exposición prolongada;
• la cantidad total de sustancias radiactivas que se han incorporado al medio ambiente;
• el ratio o proporción de radionúclidos en la precipitación o lluvia radiactiva caida a distancia;
• la distancia entre la fuente de radiación y las tierras y asentamientos agrarios;
• las características hidrogeológicas y edafológicas de las tierras agrícolas, y los fines a que se destinan;
• las características laborales de la población rural; dieta, sumi- nistro de agua,
• el tiempo transcurrido desde el accidente radiológico.

miércoles, 7 de diciembre de 2011

Necesidades de investigación y tendencias futuras

En la actualidad, la investigación sobre seguridad se centra en mejorar el diseño de los reactores de energía nuclear; más concre- tamente en reducir el riesgo y los efectos de una posible fusión del núcleo.
La experiencia adquirida en accidentes anteriores debe permitir mejorar el tratamiento terapéutico de las víctimas de una irradiación grave. Se está investigando el uso de factores de crecimiento de las células de la médula ósea (factores de crecimiento hematopoyético) para el tratamiento de la aplasia medular inducida por la radiación (insuficiencia en el desarrollo) (Thierry y cols. 1995).
Aún no están claros los efectos que provocan unas dosis bajas de radiación ionizante ni los efectos según la frecuencia de las dosis; dichos efectos deben comprenderse, tanto desde un punto de vista estrictamente científico, como con vistas a establecer dosis límite para la población en general y para los trabajadores. Es necesario desarrollar más la investigación biológica para dilu- cidar los mecanismos carcinogénicos que tienen lugar. Los resul- tados de estudios epidemiológicos a gran escala, especialmente los que se están realizando sobre trabajadores de centrales nucleares, deben contribuir a mejorar la exactitud de las estima- ciones de riesgo de cáncer en poblaciones expuestas a dosis bajas o cuantías bajas de dosis. Los estudios sobre poblaciones expuestas a radiación ionizante a causa de accidentes nos ayudarán a comprender mejor los efectos de dosis mayores, con frecuencia administradas en bajas cuantías de dosis.
La infraestructura necesaria (organización, equipo y material) para una recopilación de los datos a su debido tiempo, que es esencial para la evaluación de los efectos de los accidentes de radiación sobre la salud, debe estar implantada desde mucho antes del accidente.
Por último, es preciso realizar una amplia investigación para determinar con exactitud los efectos psicológicos y sociales de los accidentes de radiación (por ejemplo, la naturaleza, frecuencia y factores de riesgo de las reacciones psicológicas postraumáticas, patológicas o no). Esta investigación es esencial para mejorar la gestión de la población expuesta, tanto por el motivos profesio- nales como por otras razones.

martes, 6 de diciembre de 2011

Principios de protección de la población en general contra la exposición radiactiva

En casos de posible exposición de la población en general, puede ser necesario aplicar medidas de protección diseñadas para impedir o limitar la exposición a la radiación ionizante, algo especialmente importante para evitar los efectos deterministas. Las primeras medidas que deben aplicarse en caso de emergencia son la evacuación, el refugio y la administración de la cantidad adecuada de iodo. Debe distribuirse entre la población expuesta una cantidad adecuada de iodo estable, al objeto de saturar la tiroides e inhibir la absorción de iodo radiactivo. Ahora bien, para que sea eficaz, el bloqueo de la tiroides debe producirse antes o inmediatamente después del comienzo de la exposición. Por último, puede ser necesaria el reasentamiento temporal o permanente, la descontaminación y el control de la agricultura y de los alimentos.
Cada una de estas medidas de reacción tiene su propio “nivel de acción” (Tabla 39.31), que no debe confundirse con las dosis límite de CIPR para los trabajadores y para la pobla- ción en general, desarrolladas para garantizar una adecuada protección en casos de exposición no accidental (CIPR 1991).