sábado, 7 de abril de 2012

Aceptación cultural de la violencia

En muchas sociedades existe una tolerancia generalizada de la violencia entre o contra ciertos grupos (Rosenberg y Mercy 1991). Aunque muchas personas la desaprueben, se suele justificar y tolerar como respuesta “normal” ante una situación de rivalidad. La violencia entre minorías y grupos étnicos se suele consentir, al considerarla una reacción justa ante la discriminación, la pobreza y la imposibilidad de lograr una mayor justicia social o económica, lo que redunda en una escasa autoestima y en el bajo valor que se atribuye a la vida humana. Por consiguiente, la agresión se considera una consecuencia de vivir en una sociedad violenta, más que de trabajar en un lugar inseguro. Por último, existe también el “síndrome del puesto de trabajo”, en virtud del cual se presupone que los trabajadores de determinados puestos deben soportar ofensas verbales, amenazas e, incluso, agresiones físicas (SEIU 1995; Unison 1992).

viernes, 6 de abril de 2012

Alcance de la violencia en el lugar de trabajo

No se dispone de información precisa sobre el alcance de la violencia en el lugar de trabajo. La mayor parte de la documenta- ción existente se limita a los casos que se han denunciado formalmente: homicidios incluidos en las actas de defunción del registro de civil obligatorios, casos que entran a formar parte del sistema penal o aquellos que implican períodos de baja laboral y dan lugar a la reclamación de indemnizaciones. No obstante, por cada uno de esos casos existen muchos otros que no se denuncian, en los que los trabajadores son víctimas de comporta- mientos agresivos u ofensivos. Por ejemplo, de acuerdo con un estudio realizado por el Bureau of Justice Statistics del Departa- mento de Justicia de Estados Unidos, más de la mitad de los casos de agresión en el trabajo no se denunciaron a la policía. Cerca del 40 % de los encuestados respondieron que no denunciaron el incidente por considerarlo una cuestión de escasa importancia o personal, mientras que otro 27 % declararon haber informado al respecto a un directivo de la empresa o al responsable de segu- ridad, pero, aparentemente, esas circunstancias no fueron comu- nicadas a la policía (Bachman 1994). Además de la falta de consenso en cuanto a la clasificación de la violencia, hay otras razones que explican el escaso nivel de denuncias:

jueves, 5 de abril de 2012

Definición de violencia

No existe acuerdo con respecto a la definición de la violencia generalmente aceptada. Por ejemplo, Rosenberg y Mercy (1991) incluyen en su definición todos los casos de violencia interpersonal mortal o no, en los que una persona hace uso de la fuerza física o de otros medios con la intención de causar daños, lesiones o la muerte a otra persona. La Comisión para el Conocimiento y el Control de los Comportamientos Violentos elegida por la National Academy of Sciences de Estados Unidos adoptó la siguiente definición de violencia: Comportamientos de individuos que amenazan, intentan infligir o infligen un daño físico a otros de forma intencionada (Reiss y Roth 1993).
Ambas definiciones se ocupan sobre todo de la amenaza o del daño físico causado. Sin embargo, excluyen los casos en los que el insulto, el acoso y la humillación verbales, u otras formas de trauma psicológico, son el único daño infligido a la víctima, aunque no por ello menos demoledor. Tampoco contemplan el acoso sexual, que puede ser físico, aunque no es lo más habitual. Los investigadores encargados de la realización de la encuesta nacional sobre los trabajadores estadounidenses llevado a cabo por Northwestern National Life Insurance Company, dividieron los actos violentos en: acoso (acto de crear un ambiente hostil mediante palabras, acciones o contactos físicos molestos que no tengan como consecuencia un daño físico; amenazas (manifesta- ciones de la intención de causar un daño físico), y agresiones físicas (ataques violentos, con o sin uso de armas) (Lawless 1993).
En el Reino Unido, la definición de violencia en el lugar de trabajo por la que se rige el Health and Safety Executive es “todo inci- dente en el que un trabajador sea insultado, amenazado o agre- dido por otra persona en circunstancias surgidas durante el desempeño de su trabajo. Los agresores pueden ser pacientes, clientes o compañeros de trabajo” (MSF, 1993).
El término violencia se emplea en este artículo en su sentido más amplio, de forma que abarca cualquier tipo de comporta- miento agresivo o insultante susceptible de causar un daño o molestias físicas o psicológicas a sus víctimas, ya sean estos objetivos intencionados o testigos inocentes involucrados de forma no personal o accidental en los incidentes. Si bien los lugares de trabajo pueden ser objeto de atentados terroristas o pueden verse envueltos en revueltas y tumultos, no se tratarán esas circunstancias.

miércoles, 4 de abril de 2012

Alteraciones cardiovasculares, respiratorias, endocrinas y metabólicas

Se han comparado las alteraciones observadas que persisten durante la exposición a las vibraciones con las que se producen durante el trabajo físico moderado (es decir, aumentos de la frecuencia cardíaca, presión arterial y consumo de oxígeno), incluso a una magnitud de vibración cercana al límite de tole- rancia voluntaria. El aumento de ventilación obedece en parte a oscilaciones del aire en el sistema respiratorio. Las alteraciones respiratorias y metabólicas pueden no corresponderse, lo que posiblemente sugiere una perturbación de los mecanismos de control de la respiración. Se han comunicado diversos hallazgos, en parte contradictorios, sobre alteraciones de las hormonas adrenocorticotrópicas (ACTH) y las catecolaminas.

martes, 3 de abril de 2012

Alteraciones neuromusculares

Durante el movimiento natural activo, los mecanismos de control motor actúan como un control de información de ida constante- mente ajustado por la retroinformación adicional procedente de los sensores situados en los músculos, tendones y articulaciones. Las vibraciones de cuerpo completo producen un movimiento artificial pasivo del cuerpo humano, condición que difiere esencialmente de las vibraciones autoinducidas por la locomoción. La ausencia de control de información durante las vibraciones de cuerpo completo es la alteración más clara de la función fisioló- gica normal del sistema neuromuscular. La gama de frecuencias más amplia asociada con las vibraciones de cuerpo completo (entre 0,5 y 100 Hz), comparada con la del movimiento natural (entre 2 y 8 Hz para los movimientos voluntarios, e inferior a
4 Hz para la locomoción) es otra diferencia más que ayuda a explicar las reacciones de los mecanismos de control neuromus- cular a frecuencias muy bajas y a altas frecuencias.
Las vibraciones de cuerpo completo y la aceleración transi- toria determinan una actividad alternante relacionada con la aceleración en el electromiograma (EMG) de los músculos superficiales de la espalda de personas sentadas que obliga a mantener una contracción tónica. Se supone que esta actividad es de naturaleza refleja. Normalmente, desaparece por completo
si los sujetos sometidos a vibraciones permanecen sentados y relajados en posición encorvada. La temporización de la acti- vidad muscular depende de la frecuencia y magnitud de la acele- ración. Los datos electromiográficos sugieren que la columna puede verse sometida a una carga mayor debido a la reducción de la estabilización muscular de la misma a frecuencias de 6,5 a 8 Hz y durante la fase inicial a un desplazamiento brusco hacia

arriba. A pesar de la débil actividad EMG causada por las vibraciones de cuerpo completo, la fatiga de los músculos de la espalda durante la exposición a las vibraciones puede ser supe- rior a la que se observa en posturas sentadas normales sin vibraciones de cuerpo completo.
Los reflejos de los tendones pueden disminuir o desaparecer temporalmente durante la exposición a las vibraciones de cuerpo completo a frecuencias superiores a 10 Hz. Las pequeñas alteraciones del control postural tras la exposición a las vibraciones de cuerpo completo son muy variables, y sus mecanismos
e importancia práctica no son bien conocidos.

lunes, 2 de abril de 2012

Alteraciones de las funciones fisiológicas

Las alteraciones en las funciones fisiológicas se producen cuando los sujetos están expuestos a un ambiente de vibraciones de cuerpo completo en condiciones de laboratorio. Las alteraciones típicas de una “respuesta de sobresalto” (p. ej., aumento de la frecuencia cardíaca) se normalizan rápidamente con la exposi- ción continuada, mientras que otras reacciones continúan o se desarrollan de modo gradual. El último aspecto puede depender de todas las características de las vibraciones, incluyendo el eje, la magnitud de la aceleración y la clase de vibración (senoidal o aleatoria), así como de otras variables tales como el ritmo circa- diano y las características de los sujetos (véase Hasan 1970; Seidel 1975; Dupuis y Zerlett 1986). Con frecuencia no es posible rela- cionar directamente las alteraciones de las funciones fisiológicas en condiciones de campo con las vibraciones, dado que ésta suele actuar conjuntamente con otros factores significativos, como la elevada tensión mental, el ruido y las sustancias tóxicas. Las alteraciones fisiológicas son frecuentemente menos sensibles que las reacciones psicológicas (p. ej., el malestar). Si todos los datos disponibles sobre las alteraciones fisiológicas persistentes se resumen respecto a su primera aparición significativa, dependiendo de la magnitud y frecuencia de las vibraciones de cuerpo completo, hay un umbral con un límite inferior en torno a un valor eficaz de 0,7 m/s2 entre 1 y 10 Hz, que aumenta hasta un valor eficaz de 30 m/s2 a 100 Hz. Se han realizado numerosos estudios con animales, pero su relevancia para los humanos es dudosa.

domingo, 1 de abril de 2012

Cantidades y unidades (IVI)

En el espacio, Z  120   377  pero en los restantes casos Z depende de la permitividad y permeabilidad del material a través del cual viaja la onda.
La transferencia de energía se describe por el vector de Poynting, que representa la magnitud y dirección de la densidad del flujo electromagnético.