jueves, 31 de mayo de 2012

Médula ósea y tejido linfoide.

. Los linfocitos también son muy radiosensibles; una dosis de 2 a 3 Sv irradiada en poco tiempo a todo el cuerpo puede destruir un número suficiente de ellos para que disminuya el recuento de linfocitos periféricos y la respuesta inmunitaria se deteriore en pocas horas (UNSCEAR 1988). Las células hematopoyéticas de la médula ósea tienen una sensibi- lidad similar a la radiación y su depleción con una dosis compa- rable es suficiente para causar granulocitopenia y trombo- citopenia en las tres a cinco semanas siguientes. Si la dosis es mayor, estas disminuciones del recuento de granulocitos y plaquetas pueden ser lo bastante graves para originar hemo- rragia o una infección mortal (Tabla 48.4).

miércoles, 30 de mayo de 2012

Manifestaciones clínicas de la lesión: Efectos agudos.

Los efectos agudos de la radiación se deben sobre todo a la depleción de células progenitoras en los tejidos afectados (Figura 48.7), y sólo pueden inducirse por dosis lo bastante grandes para matar muchas de estas células (por ejemplo, Tabla 48.3). Por este motivo, tales efectos se consideran de naturaleza no estocástica, o determinista (CIPR 1984 y 1991), en contraste con los efectos mutágenos y cancerígenos de la radiación, que se consideran fenómenos estocásticos resultantes de alteraciones moleculares aleatorias en células individuales que aumentan como funciones lineales, sin umbral, de la dosis (NAS 1990; CIPR 1991).
Las lesiones agudas de los tipos que predominaban en los primeros trabajadores expuestos y en los pacientes tratados inicialmente con radioterapia han desaparecido prácticamente gracias a las mejoras introducidas en las precauciones de segu- ridad y en los métodos de tratamiento. Sin embargo, la mayoría de los pacientes tratados con radiación en la actualidad experi- mentan también alguna lesión del tejido normal irradiado. Además, siguen ocurriendo accidentes radiológicos graves. Por ejemplo, entre 1945 y 1987 se informó de unos 285 acci- dentes en reactores nucleares (excluido el de Chernóbil) ocurridos en diversos países, en los que resultaron irradiadas más de 1.350 personas, 33 de ellas con resultado mortal (Lushbaugh, Fry y Ricks 1987). El accidente de Chernóbil, por sí solo, liberó material radiactivo suficiente para exigir la evacua- ción de decenas de millares de personas y animales domésticos del área circundante, y originó enfermedades radiológicas y quemaduras en más de 200 personas entre componentes de equipos de emergencia y bomberos, de las que 31 fallecieron
(UNSCEAR 1988). Los efectos a largo plazo del material radiac- tivo liberado sobre la salud no pueden predecirse con certeza, pero las estimaciones de los riesgos resultantes de efectos cance- rígenos, basadas en modelos de incidencia de dosis sin umbral
(comentados a continuación), suponen que pueden producirse hasta 30.000 muertes adicionales por cáncer en la población del hemisferio norte durante los 70 próximos años a consecuencia del accidente, aunque es probable que los casos adicionales de cáncer en cualquier país sean demasiado escasos para permitir su detección epidemiológica (USDOE 1987).
Menos catastróficos, pero mucho más numerosos que los acci- dentes de reactores, han sido los accidentes en que han interve- nido fuentes de rayo gamma médicas e industriales, que también han sido causa de lesiones y pérdida de vidas. Por ejemplo, la eliminación inadecuada de una fuente de radioterapia de cesio
137 en Goiânia, Brasil, en 1987 originó la irradiación de docenas de víctimas confiadas, cuatro de las cuales murieron (UNSCEAR 1993).
Una exposición amplia de las lesiones por radiación escapa al ámbito de esta revisión, pero las reacciones agudas de los tejidos más radiosensibles son de interés general, por lo que se describen brevemente en las secciones siguientes.
Piel. Las células de la capa germinal de la epidermis son muy sensibles a la radiación. En consecuencia, la rápida exposición de la piel a una dosis de 6 Sv o más provoca eritema (enrojecimiento) de la zona expuesta, que aparece dentro del primer día, suele durar unas cuantas horas y va seguido al cabo de dos a cuatro semanas de una o más oleadas de un eritema más profundo y prolongado, así como de depilación (pérdida de pelo). Si la dosis supera los 10 a 20 Sv, en dos o cuatro semanas pueden surgir ampollas, necrosis y ulceración, seguidas de fibrosis de la dermis y los vasos subyacentes, que pueden desem- bocar en atrofia y una segunda oleada de ulceración meses o años después (CIPR 1984).

martes, 29 de mayo de 2012

Manifestaciones clínicas de la lesión: Tipos de efectos.

Tipos de efectos. Los efectos de la radiación abarcan una amplia variedad de reacciones, que varían de modo notable en sus relaciones dosisespuesta, manifestaciones clínicas, cronología y pronóstico (Mettler y Upton 1995). Los efectos suelen subdivi- dirse por comodidad en dos amplios grupos: (1) efectos heredables, que se manifiestan en los descendientes de los individuos expuestos, y (2) efectos somáticos, que se manifiestan en los propios individuos expuestos. En estos últimos se incluyen los efectos agudos, que aparecen relativamente pronto después de la irradia- ción, así como los efectos tardíos (o crónicos), como el cáncer, que puede no aparecer hasta que han transcurrido meses, años o decenios.

lunes, 28 de mayo de 2012

Identificación de la fuente de ruido (II)

Uno de los métodos más eficaces para localizar la fuente del ruido consiste en medir su espectro de frecuencias. Una vez medidos los datos, es muy útil representar gráficamente los resultados de modo que puedan visualizarse las características de dicha fuente. En la mayoría de los problemas de supresión del ruido, las mediciones pueden realizarse utilizando filtros de octava o de tercio de octava con el sonómetro. La ventaja de la medición a un tercios de octava es que proporciona información más detallada acerca de lo que emite un equipo concreto. La Figura 47.4 presenta una comparación entre mediciones en octavas y tercios de octava realizadas cerca de una bomba de nueve pistones. Tal como se observa, los datos en tercios de octava identifican claramente la frecuencia de bombeo y muchos de sus armónicos. Si sólo se utilizan datos en octavas, represen- tados por la línea más densa y trazados para la frecuencia central de cada banda en la Figura 47.4, resulta más difícil diag- nosticar lo que ocurre dentro de la bomba. Con datos en octavas hay un total de nueve puntos de datos entre 25 hertzios (Hz) y 10.000 Hz, como ilustra esta figura. Sin embargo, hay un total de 27 puntos de datos en esta gama de frecuencias con la utiliza- ción de las medidas en tercios de octava. Evidentemente, los datos en tercios de octava proporcionarán más datos útiles para identificar la causa de un ruido. Esta información es decisiva si el objetivo es controlar el ruido en origen. Si lo único que inte- resa es tratar la vía por la que se transmiten las ondas sonoras, entonces serán suficientes los datos en octavas a los efectos de elegir productos o materiales acústicamente apropiados.

domingo, 27 de mayo de 2012

Identificación de la fuente de ruido (I)

Uno de los aspectos más difíciles del control del ruido es la identi- ficación de la fuente. En un ambiente industrial típico suele haber varias máquinas en funcionamiento al mismo tiempo, con lo cual resulta difícil identificar la causa origen del ruido, sobre todo si se utiliza un sonómetro estándar. Este indica un nivel de presión acústica (Sound Pressure Level, SPL) en un punto específico, que muy probablemente es el resultado de más de una fuente de ruido. Por consiguiente, el inspector tiene que emplear un enfoque sistemático que permita separar cada fuente de las demás y conocer su aportación relativa al SPL total. Las técnicas siguientes pueden contribuir a identificar el origen o la fuente del ruido:
• Medir el espectro de frecuencias y representar los datos gráficamente.
• Medir el nivel sonoro, en dBA, en función del tiempo.
• Comparar los datos de frecuencias con equipos o líneas de producción similares.
• Aislar componentes con controles temporales o conectar y desconectar un equipo tras otro, siempre que sea posible.

sábado, 26 de mayo de 2012

Conversión de los equipos existentes

Antes de decidir lo que es preciso hacer, hay que identificar la causa origen del ruido. Para ello, es útil comprender cómo se genera éste. El ruido es creado en su mayor parte por impactos mecánicos, por la circulación de aire a gran velocidad, por la circulación de líquidos a gran velocidad, por las superficies vibra- torias de una máquina y, con bastante frecuencia, por el producto que se fabrica. Esto último es lo que suele ocurrir en industrias de fabricación y transformación como la metálica, la fabricación de vidrio, la elaboración de alimentos, la minería, etc., en las que la interacción entre el producto y las máquinas produce la energía que crea el ruido.

viernes, 25 de mayo de 2012

El control del ruido en el diseño de fábricas y productos (IV)

En Estados Unidos, el ANSI ha publicado la norma ANSI S12.16, titulada “Directrices para la especificación del ruido en maquinaria nueva” (Guidelines for the Specification of Noise of New Machinery, 1992). Se trata de una guía útil para redactar una especificación interna de una empresa en materia de ruido. Además, contiene directrices para obtener datos de nivel sonoro de los fabricantes de los equipos. Una vez obtenidos estos datos, pueden ser utilizados por los proyectistas para planificar la distribución en planta de los equipos. Debido a los diversos tipos de equipos y herramientas distintos para los que se ha preparado esta norma, no existe un único protocolo de inspección apro- piado para la medida del nivel sonoro. En consecuencia, esta norma contiene información de referencia sobre el procedi- miento apropiado de medición de ruido para ensayar diversos equipos estacionarios. Estos procedimientos de control han sido preparados por la asociación o la organización profesional perti- nente y responsable en Estados Unidos para un determinado tipo o clase de bienes de equipo.

jueves, 24 de mayo de 2012

Combinación y elección de los colores: Equipo (I)

Equipo: las superficies de trabajo, mesas y maquinaria deberán tener factores de reflexión de entre un 20 y un 40 %. Los equipos deberán tener un acabado duradero de un color puro —grises o marrones claros— y el material no deberá ser brillante.
El uso apropiado de los colores en el ambiente de trabajo contribuye al bienestar, aumenta la productividad y puede tener efectos positivos para la calidad. También puede contribuir a mejorar la organización y a prevenir accidentes.
Existe la creencia generalizada de que blanquear paredes y techos y suministrar niveles adecuados de iluminación es todo lo que puede hacerse por lo que se refiere al confort visual de los empleados. Pero estos factores de confort pueden mejorarse combinando el blanco con otros colores, evitando así la fatiga y el aburrimiento que caracterizan a los ambientes monocromá- ticos. Los colores también afectan al nivel de estímulo de una persona: los colores cálidos tienden a activar y relajar, mientras los colores fríos se utilizan para inducir al individuo a liberar su energía.
El color de la luz, su distribución y los colores utilizados en un espacio determinado son, entre otros, los principales factores que influyen en las sensaciones que tienen las personas. Dados los muchos colores y factores de confort existentes, es imposible establecer directrices precisas, especialmente teniendo en cuenta
que todos estos factores deben combinarse de acuerdo con las características y necesidades de un determinado puesto de trabajo. Por lo demás, es posible citar varias normas prácticas básicas y generales que pueden contribuir a crear un ambiente habitable.

miércoles, 23 de mayo de 2012

Combinación y elección de los colores: Paredes y suelos

las superficies de las paredes situadas a nivel de los ojos pueden provocar deslumbramiento. Los colores pálidos con factores de reflexión del 50 al 75 % suelen ser adecuados para las paredes. Aunque las pinturas brillantes tienden a durar más tiempo que los colores mate, son más reflectantes. Por consiguiente, las paredes deberán tener un acabado mate o semibrillante.
Los acabados de los suelos deberán ser de colores ligeramente más oscuros que las paredes y los techos para evitar brillos. El factor de reflexión de los suelos debe oscilar entre el 20 y el 25 %.

martes, 22 de mayo de 2012

Combinación y elección de los colores: Techos

La superficie de un techo debe ser lo más blanca posible (con un factor de reflexión del 75 %), porque entonces reflejará la luz de manera difusa, disipando la oscuridad y reduciendo los brillos de otras superficies. A ello se añade el ahorro en ilumina- ción artificial.

lunes, 21 de mayo de 2012

Combinación y elección de los colores

La elección de los colores es muy relevante si la estudiamos conjuntamente con aquellas funciones en las que es importante identificar los objetos que se han de manipular. También es relevante a la hora de delimitar vías de comunicación y en aquellas tareas que requieren un contraste nítido.
La elección de la tonalidad no es una cuestión tan importante como la elección de las cualidades reflectantes apropiadas de una superficie. Existen varias recomendaciones que pueden aplicarse a este aspecto de las superficies de trabajo:

domingo, 20 de mayo de 2012

La ventilación por dilución

La ventilación por dilución tiene por objeto mezclar al máximo el aire que se introduce mecánicamente con todo el aire ya exis- tente, de modo que la concentración de un determinado contaminante sea lo más uniforme posible en todo el espacio (o de modo que la temperatura sea lo más uniforme posible, si lo que se pretende conseguir es el control térmico). Para conseguir la uniformidad, se inyectan corrientes de aire desde el techo a velocidad relativamente alta, para generar una fuerte circulación del aire. El resultado es un alto grado de mezcla del aire fresco con el aire ya presente en el espacio en cuestión.

sábado, 19 de mayo de 2012

OBJETIVOS Y PRINCIPIOS DE LA VENTILACION GENERAL Y DE LA VENTILACION DE DILUCION (II)

Por otra parte, si el objetivo de la ventilación general es mantener las características térmicas del ambiente de trabajo con vistas a cumplir límites legalmente aceptables o recomenda- ciones técnicas, como las directrices de la Organización Internacional de Normalización (International Organization for Standardization, ISO), este método tiene menos limitaciones. Por consiguiente, la ventilación general se utiliza más que para controlar el ambiente térmico, para limitar la contaminación química, pero es obligado reconocer su utilidad como complemento de las técnicas de extracción localizada.
Aunque las expresiones ventilación general y ventilación por dilución se han considerado sinónimas durante muchos años, en la actualidad ya no es así, debido a una nueva estrategia de ventilación general: la ventilación por desplazamiento. Aunque la ventilación por dilución tanto como la ventilación por desplazamiento encajan en la definición de ventilación general anteriormente descrita, sus estrategias para controlar la contaminación son muy diferentes.

viernes, 18 de mayo de 2012

OBJETIVOS Y PRINCIPIOS DE LA VENTILACION GENERAL Y DE LA VENTILACION DE DILUCION (I)

Si los contaminantes generados en un lugar de trabajo han de ser controlados ventilando todo el recinto, hablamos de ventilación general. Su utilización implica la aceptación de que el contaminante se distribuya en cierta medida por todo el lugar de trabajo y pueda por tanto afectar a los trabajadores que estén lejos de la fuente de contaminación. Por consiguiente, la ventilación general es la estrategia opuesta a la extracción localizada, que pretende eliminar el contaminante interceptándolo lo más cerca posible de la fuente (véase “El aire en interiores: métodos de control y depu- ración”, en este mismo capítulo).
Uno de los objetivos básicos de cualquier sistema de ventilación general es el control de los olores corporales, y es posible lograrlo suministrando no menos de 0,45 metros cúbicos por minuto de aire fresco por ocupante. Si se fuma con frecuencia o el trabajo requiere un intenso esfuerzo físico, será preciso aumentar la ventilación, hasta superar los 0,9 m3/min por persona.
Si los únicos problemas ambientales que debe resolver el sistema de ventilación son los que acabamos de describir, es conveniente tener en cuenta que cada recinto tiene cierto nivel de renovación de aire “natural” por medio de la llamada “infil- tración”, que se produce a través de puertas y ventanas, incluso estando cerradas, y a través de otros puntos de penetración de las paredes. Los manuales de los sistemas de aire acondicionado suelen contener amplia información a este respecto, pero puede decirse que, como mínimo, el nivel de ventilación debido a la infiltración alcanza entre las 0,25 y 0,5 renovaciones por hora. Un recinto industrial experimentará normalmente entre 0,5 y
3 renovaciones de aire por hora.
Si se utiliza para controlar contaminantes químicos, la ventilación general deberá limitarse exclusivamente a aquellas situaciones en las que no se generen grandes cantidades de contaminantes y sean de toxicidad relativamente moderada, y en las que los trabajadores no realicen sus tareas muy cerca de la fuente de contaminación. Si no se respetan estas condiciones, será difícil conseguir un control adecuado del ambiente de trabajo ya que las tasas de renovación de aire tendrán que ser tan altas que la velocidad del aire creará malestar, además de que mantener unas tasas de renovación tan altas resulta caro.

Por consiguiente, no suele recomendarse la ventilación general para el control de sustancias químicas, excepto en el caso de los disolventes que tengan concentraciones admisibles de más de
100 partes por millón.

jueves, 17 de mayo de 2012

Ozonización (I)

Los procesos que emplean ozono deben llevarse a cabo en espacios cerrados o tener un sistema de extracción localizado para capturar cualquier liberación de gas en su origen. Los cilindros de ozono deben almacenarse en áreas refrigeradas, lejos de agentes reductores, materiales inflamables o productos que puedan catalizar su disgregación. Hay que tener en cuenta que si los ozonadores funcionan a presiones negativas y tienen dispositivos de paro automático en caso de avería, se minimiza la posibilidad de que se produzcan fugas.
Los equipos eléctricos utilizados en procesos que empleen ozono deben estar perfectamente aislados y su manteni- miento debe estar a cargo de personal experimentado. Si se utilizan ozonadores, los conductos y equipos accesorios deberán tener dispositivos que cierren inmediatamente los ozonadores en los casos siguientes: si se detecta una fuga; cuando se produce una pérdida de eficacia en las funciones de ventilación, deshumidificación o refrigeración; si se produce un exceso de presión o un vacío (según el sistema);
o si la potencia del sistema es excesiva o insuficiente.
Cuando se instalen ozonadores, deberán ir provistos de detectores específicos para ozono. No puede confiarse en el sentido del olfato porque puede saturarse. Las fugas de ozono se detectan con tiras reactivas de yoduro de potasio que se vuelven azules, pero no es un método específico, ya que la prueba da positivo con la mayoría de los oxidantes. Es mejor realizar un control de fugas continuado por medio de acumuladores electroquímicos, fotometría de ultravioletas o quimioluminiscencia, conectando el dispositivo de detección elegido a un sistema de alarma que actúe cuando se alcancen ciertas concentraciones.

miércoles, 16 de mayo de 2012

Insectos

Aunque estos organismos y sus productos excretores pueden causar también alergias respiratorias y de otra naturaleza, no parecen contribuir de forma significativa a la carga biológica en suspensión en el aire en la mayoría de las situaciones. Las partí- culas de cucarachas (especialmente Blatella germanica y Periplaneta americana) pueden ser un componente importante en ambientes de trabajo insalubres, cálidos y húmedos. Las exposiciones a partículas de cucarachas y otros insectos, como langostas, gorgojos, escarabajos y moscas de la fruta, pueden ser causa de problemas de salud entre los trabajadores de instalaciones de cría de animales y laboratorios.

martes, 15 de mayo de 2012

Detritus

El detritus está constituido por partículas finas de piel, pelo y plumas (y saliva y orina desecadas), y es una fuente de potentes alergenos que pueden causar ataques de rinitis o asma en personas susceptibles. Las principales fuentes de detritus en ambientes de interior suelen ser los gatos y los perros, pero también son fuentes potenciales las ratas y los ratones (como mascotas, animales de experimentación o vermes), hámsters, jerbos (una especie de rata del desierto), cobayas y pájaros de jaula. El detritus originado por éstos y otros animales de granja y de compañía (como los caballos) puede estar en la ropa, pero en los ambientes de trabajo la mayor exposición al detritus probablemente tenga lugar en instalaciones de cría de animales y labora- torios o en edificios infestados de vermes.

lunes, 14 de mayo de 2012

Polen

Los granos de polen contienen sustancias (alergenos) que pueden causar respuestas alérgicas en personas susceptibles o atópicas, que se manifiestan generalmente como “fiebre del heno” o rinitis. La alergia se asocia principalmente al medio ambiente exterior; en el aire interior, las concentraciones de polen suelen ser consi- derablemente menores que en el aire atmosférico La diferencia en la concentración de polen entre el aire exterior y el interior es mayor en el caso de los edificios en los que los sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado (CVAA) tienen una filtración eficaz en la entrada del aire externo. Las unidades de aire acondicionado de ventana también producen niveles de polen en el interior más bajos que los existentes en edificios con ventilación natural. El aire de algunos ambientes de trabajo de interior puede llegar a tener un contenido elevado de polen, como en el caso de que exista un gran número de plantas con flores por razones esté- ticas o en los invernaderos comerciales.

domingo, 13 de mayo de 2012

Características y orígenes de la contaminación biológica del aire interior

Aunque existe una amplia variedad de partículas de origen biológico (biopartículas) en el aire interior, en la mayoría de los ambientes de trabajo de interior los microorganismos (microbios) tienen gran importancia para la salud. Además de microorga- nismos (como virus, bacterias, hongos y protozoos), el aire interior puede contener granos de polen, detritus animal y fragmentos de insectos y ácaros y sus productos de excreción (Wanner y cols.
1993). Además de los aerosoles biológicos de estas partículas, también puede haber compuestos orgánicos volátiles que emanan de organismos vivos, como las plantas y los microorganismos presentes en el interior.

sábado, 12 de mayo de 2012

Otros índices racionales

El índice SWreq y la norma ISO 7933 (1989) constituyen el Humedad máxima de la piel Alarma Peligro Alarma Peligro método racional más sofisticado basado en la ecuación del equili- brio térmico y han supuesto un gran avance. Aunque puede mejorarse aún más, hay otro método alternativo que consiste en utilizar un modelo térmico. La nueva Temperatura Efectiva (TE*) y la Temperatura Efectiva Estándar (TEE) son índices basados en el modelo binodal de la regulación térmica en el ser humano (Nishi y Gagge 1977). Givoni y Goldman (1972, 1973) han propuesto también otros modelos empíricos de predicción para evaluar el estrés por calor.

viernes, 11 de mayo de 2012

Interpretación de SWreq

Para realizar una interpretación práctica de los valores calcu- lados, se utilizan valores de referencia en términos de lo que es aceptable y factible (véase la Tabla 42.4).
En primer lugar se realiza una predicción de la humedad de la piel (Wp ), la tasa de evaporación (Ep ) y la tasa de sudoración (SWp) . Básicamente, si los valores calculados como necesarios son factibles, se consideran valores previstos (p. ej., SWp = SWreq). Si no son factibles, pueden tomarse como valores máximos
(p. ej., SWp = SWmax ). En el diagrama de flujos de decisión se ofrecen más detalles (véase la Figura 42.5).
Si la tasa de sudoración requerida puede conseguirse sin que se produzca una pérdida inadmisible de agua, no existe ningún límite en la exposición al calor durante un turno de trabajo de
8 horas. De lo contrario, se calculan las exposiciones de duración limitada (EDL) a partir de:
Cuando Ep = Ereq y SWp = Dmax/8, entonces EDL =
480 minutos y SWreq puede utilizarse como índice de estrés por calor. Si lo anterior no se cumple, entonces:

jueves, 10 de mayo de 2012

Tasa de sudoración requerida

Otra mejora teórica y práctica incorporada al HSI y al ITS fue la tasa de sudoración requerida (required sweat rate, SWreq ) (Vogt y cols. 1981). Es un índice que calcula la sudoración necesaria para conseguir el equilibrio térmico a partir de una ecuación perfeccionada del equilibrio térmico, pero lo más importante es que constituye un método práctico para interpretar los cálculos comparando lo que se necesita con lo que es fisiológicamente posible y aceptable en el ser humano.
Los extensos debates y las evaluaciones industriales y de laboratorio (CEC 1988) de este índice tuvieron como resultado su aceptación como Norma Internacional ISO 7933 (1989b). Las diferencias entre las respuestas observadas y esperadas de los trabajadores motivaron la inclusión de notas de advertencia con relación a los métodos de evaluación de la deshidratación y la transferencia de calor por evaporación a través de la ropa en la propuesta de su adopción como Norma Europea (prEN-12515).
(Véase “II. Tasa de sudoración requerida” en el recuadro Indices de calor.)

miércoles, 9 de mayo de 2012

Indice de Estrés Térmico (Index of Thermal Stress, ITS)

Givoni (1963, 1976) propuso el Indice de Estrés Térmico, que es una versión mejorada del Indice de Estrés por Calor. Una mejora importante es que se reconoce que no todo el sudor se evapora (véase “I. Indice de estrés térmico” en el recuadro Indices de calor de la página 42.22.)


martes, 8 de mayo de 2012

Información adicional

Esta sección de la Enciclopedia presenta una visión de conjunto resumida de los sistemas activos contra incendios existentes en la actualidad en el mercado. El lector podrá encontrar más información en su asociación nacional contra incendios, su agente asegurador o el departamento de prevención de incendios de su localidad.

lunes, 7 de mayo de 2012

Diseño, instalación y mantenimiento de sistemas activos contra incendio

Este tipo de equipos sólo debería ser diseñado, instalado y mantenido por expertos. Para poder realizar su trabajo con efectividad los encargados de la compra, instalación, inspección, pruebas, homologación y mantenimiento de estos equipos deberían consultar a un especialista competente y experimentado en la lucha contra incendios.

domingo, 6 de mayo de 2012

Sistemas de hidrocarburos halogenados

Los agentes de hidrocarburos halogenados se desarrollaron como consecuencia de la preocupación ambiental por sustituir a los halones. Estos agentes difieren ampliamente entre sí en cuanto a toxicidad, impacto ambiental, peso de almacenamiento, requisitos de volumen, coste y disponibilidad del equipo aprobado. Todos ellos pueden almacenarse como gases licuados en depósitos a presión. La configuración del sistema es similar a la del dióxido de carbono.

sábado, 5 de mayo de 2012

Sistemas de halones

Los halones 1301, 1211 y 2402 están clasificados como sustancias que destruyen la capa de ozono. En 1994 se ha abandonado la producción de estos agentes de extinción de acuerdo con lo estipulado en el Protocolo de Montreal, acuerdo internacional para proteger la capa de ozono de la Tierra. El halón 1301 se utilizaba principalmente en sistemas contra incendios fijos y se almacenaba como gas licuado y comprimido en depósitos a presión como los utilizados para el dióxido de carbono. La ventaja del halón 1301 era que sus presiones de almacenamiento eran inferiores y que una concentración muy baja proporcionaba una capacidad de extinción efectiva. Los sistemas de halón 1301 se utilizaban con éxito para incendios en recintos totalmente cerrados donde la concentración de extinción alcanzada puede mantenerse durante un período suficiente de tiempo como para extinguir el incendio. En la mayoría de los casos las concentraciones utilizadas no suponían una amenaza inmediata para los ocupantes. El halón 1301 se sigue utilizando en casos excepcionales para los que no existen alternativas aceptables como, por ejemplo, en incendios en aviones comerciales y militares y en algunos casos especiales en los que se necesitan concentraciones de inertización para evitar explosiones en zonas con ocupantes. El halón de los sistemas exis- tentes ya sustituidos deberá utilizarse para aplicaciones críticas, evitando así tener que seguir produciendo estos productos de extinción que son nocivos para el medio ambiente y se ayudará a proteger la capa de ozono.

viernes, 4 de mayo de 2012

Edificios

Hay que lavar regularmente tanto el exterior como el interior de los edificios. Las construcciones deben estar provistas de duchas. Para la preparación de forraje que contenga componentes en polvo, es necesario respetar los procedimientos de prevención de la absorción de polvo por parte de los trabajadores, así como mantener libre de polvo los suelos, equipos, etc.
La presurización del equipo debe realizarse bajo control. Los lugares de trabajo deben dotarse de una ventilación general eficaz.

jueves, 3 de mayo de 2012

Maquinaria agrícola

Uno de los principales peligros para los trabajadores es la maquinaria agrícola contaminada por radionúclidos. El tiempo de trabajo admisible con máquinas depende de la intensidad de la radiación gamma emitida por las superficies de la cabina. No sólo es imperativa la total presurización de la misma, sino también un control adecuado de los sistemas de ventilación y de aire acondicionado. Concluido el trabajo, deben lavarse las cabinas y susti- tuirse los filtros.

Al mantener y reparar las máquinas tras los procedimientos de descontaminación, la intensidad de la radiación gamma en las superficies exteriores no debe superar los 0,3 mR/h.

miércoles, 2 de mayo de 2012

Agrotecnología

Al realizar tareas agrarias en condiciones de contaminación intensa de suelos y plantas, es necesario respetar estrictamente las medidas de prevención de la contaminación por polvo. La carga
y descarga de sustancias secas y polvorientas debe mecanizarse, cubriendo con tela el cuello del tubo transportador. También deben adoptarse medidas para reducir la liberación de polvo en cualquier otra faena agrícola.
El trabajo con maquinaria agrícola debe efectuarse vigilando la presurización de la cabina y eligiendo la dirección adecuada para trabajar con el viento por el costado preferible. Si es posible, se recomienda regar primero las áreas de cultivo. Es aconsejable utilizar las tecnologías industriales para eliminar en la mayor medida posible el trabajo manual en el campo.
Conviene aplicar a los suelos sustancias capaces de potenciar la absorción y fijación de los radionúclidos, transformándolos en compuestos insolubles e impidiendo así su transmisión a las plantas.

martes, 1 de mayo de 2012

Requisitos de higiene Programas de trabajo

Después de accidentes graves en centrales nucleares, suelen implantarse normativas temporales para la población. Tras el accidente de Chernóbil, se adoptaron normas para un período de un año, con el TLV de 10 cSv. Se considera que los trabajadores reciben el 50 % de su dosis por radiación externa durante el trabajo. Aquí, la intensidad máxima de radiación en la jornada laboral de ocho horas no debe superar los 2,1 mR/h.
En las faenas agrarias, los niveles de radiación en el lugar de trabajo pueden fluctuar mucho dependiendo de la concentra- ción de sustancias radiactivas en el suelo y en las plantas; varían también durante su procesamiento tecnológico (ensilaje, elaboración de forraje seco, etc.). Para reducir las dosis soportadas por los trabajadores, se introducen reglamentos de limitación temporal de las tareas agrarias. En la Figura 39.12 se indican los reglamentos adoptados tras el accidente de Chernóbil.