Su finalidad es conservar la instalación eléctrica en la condición adecuada. El mantenimiento puede ser preventivo (es decir, periódico, para evitar paradas y mantener el equipo en condiciones de trabajo normal) o correctivo (es decir, el realizado para sustituir piezas defectuosas).
El trabajo de mantenimiento se clasifica en dos categorías de riesgo:
El trabajo de mantenimiento se clasifica en dos categorías de riesgo:
• trabajo que implica el riesgo de descarga eléctrica, en que deben observarse los procedimientos aplicables al trabajo con tensión y al trabajo en la proximidad de partes activas,
• trabajo en que el diseño del equipo permite realizar algunas operaciones de mantenimiento sin necesidad de aplicar proce- dimientos completos de trabajo con tensión.
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