Los pacientes “escupidos” por este tipo de elápidos experimentan dolor intenso en los ojos, conjuntivitis, blefarospasmo, edema palpebral y leucorrea. En más de la mitad de los pacientes escupidos por N. nigricollis se observan erosiones en la córnea. Rara vez, el veneno es absorbido en la cámara anterior, causando hipopión y uveitis anterior. La infección secundaria a las erosiones corneales puede producir opacidades permanentes que dificultan la visión o panoftalmitis.
Temas
- CALIDAD DEL AIRE INTERIOR
- CALOR Y FRIO
- CONTROL AMBIENTAL EN INTERIORES
- CONTROL DE LA CONTAMINACION AMBIENTAL
- DESASTRES NATURALES Y TECNOLOGICOS
- ELECTRICIDAD
- HORAS DE TRABAJO
- ILUMINACION
- INCENDIOS
- POLITICA EN MATERIA DE MEDIO AMBIENTE
- PRESION BAROMETRICA AUMENTO
- PRESION BAROMETRICA REDUCCION
- PREVENCION DE ACCIDENTES
- RADIACIONES IONIZANTES
- RADIACIONES NO IONIZANTES
- RIESGOS BIOLOGICOS
- RUIDO
- VIBRACIONES
- VIOLENCIA
sábado, 12 de julio de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario